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El ‘otro’ Madrid

Atlético Los albirrojos españoles lograron en dos temporadas una Europa League, una Supercopa y una Copa del Rey.

/ 15 de julio de 2013 / 05:48

Para quienes optan por comprender el fútbol a partir del número de cabezas de su funcionamiento, estará claro que si existe una liga bicéfala es la española, dada la gran asimetría prevaleciente en todos los órdenes que separa al Real Madrid y al Barcelona de los 18 restantes clubes, de los cuales algunos llegan a compensar esas diferencias, merced a sus participaciones en los dos principales torneos europeos que les permiten vitrina y posibilidades competitivas.

En ese ámbito de comprensión resulta chocante que se minimice o no se le otorgue el relieve que corresponde a todo lo hecho por el “otro” Madrid, el Atlético, que en dos temporadas ha logrado una Europa League con nueve victorias consecutivas en partidos eliminatorios, una Supercopa goleando al Chelsea 4-1,y una Copa del Rey que entre otras cosas produjo algo así como la estocada final a la era Mourinho al frente del equipo merengue. El entrenador de ese cuadro se llama Diego Simeone, el Cholo, portaestandarte de los rojiblancos en sus tiempos de mediocampista guerrero que lo distinguieron, además, como parte fundamental de la identidad de la selección argentina en los 90 y parte de la primera década del nuevo siglo.

Fundado en 1903, todos los futboleros del país ibérico reconocen a la hinchada del Atlético como una de las más fervorosas que tiene entre sus seguidores al canta-autor Joaquín Sabina, que apenas tiene ocasión en los escenarios homenajea sin reservas al equipo de sus amores, ese nombrado como el de los colchoneros a partir de 1911 por la similitud de la camiseta con las telas de las fundas de los colchones de la época.

Entre los acontecimientos de una rica historia figura la contratación del legendario entrenador argentino Helenio Herrera, que posibilitó la consecución de los títulos de liga de 1949 y 1950, y como dato colorido hay que recordar a Jesús Gil y Gil, que fue elegido en 1987 presidente del club y que se distinguió por una muy particular y estrambótica manera de dirigir al club que le granjeaba simpatizantes y detractores que lo situaron en el casillero de los excéntricos.

El Atlético de Madrid es inequívocamente el tercero en cuestión del fútbol español, y aunque estimulado por los últimos importantes trofeos obtenidos en las dos recientes temporadas, Simeone con los pies bien asentados sobre la tierra reconoce con toda madurez y honestidad que será muy difícil superar la vigente supremacía del Real y del Barça, asunto que por supuesto lo invita a seguir construyendo un equipo aplicado en el que se promueve la competencia interna entre todos los jugadores del primer plantel a objeto de mantener un estilo de juego que le permita seguir en la senda competitiva.

Para encarar la temporada 2013-2014 ha tenido que ser resonante la contratación de David Villa, que en la última temporada con la camiseta del Barcelona expuso un rendimiento irregular debido a una lesión que todavía no le permite ser ese endiablado goleador, especialmente protagonista de la selección española en los últimos cinco años y, por otra parte, para reforzar la línea de fondo se ha materializado la incorporación del argentino Martin Demichelis, procedente del exitoso Málaga que realizó una gran Champions League al mando del chileno Manuel Pellegrini.

Como muestra de su muy sólida cantera resulta ineludible citar la figura de Fernando El Niño Torres, que fue por varias temporadas goleador del equipo, con incidencia efectiva, además, en la selección dirigida por Luis Aragonés primero y ahora por Vicente del Bosque, tal como pudo advertirse en la última Copa Confederaciones recientemente disputada en Brasil.

Llegados de Sudamérica fueron también fundamentales las aportaciones del uruguayo Diego Forlán y ahora último del colombiano Radamel Falcao García, que ha sido transferido al Mónaco y que se constituye en uno de los cinco mejores delanteros del mundo, gracias al crecimiento que él mismo ha buscado y conseguido como el definidor de este Atlético de Madrid que cuenta en su banquillo con este Diego Simeone, que a diferencia de varios de sus compatriotas, es un entrenador extranjero ganador que algún día pretende dirigir a la selección de su país.

Julio Peñaloza Bretel es periodista y asesor de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF)

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Atlético Los albirrojos españoles lograron en dos temporadas una Europa League, una Supercopa y una Copa del Rey.

/ 15 de julio de 2013 / 05:48

Para quienes optan por comprender el fútbol a partir del número de cabezas de su funcionamiento, estará claro que si existe una liga bicéfala es la española, dada la gran asimetría prevaleciente en todos los órdenes que separa al Real Madrid y al Barcelona de los 18 restantes clubes, de los cuales algunos llegan a compensar esas diferencias, merced a sus participaciones en los dos principales torneos europeos que les permiten vitrina y posibilidades competitivas.

En ese ámbito de comprensión resulta chocante que se minimice o no se le otorgue el relieve que corresponde a todo lo hecho por el “otro” Madrid, el Atlético, que en dos temporadas ha logrado una Europa League con nueve victorias consecutivas en partidos eliminatorios, una Supercopa goleando al Chelsea 4-1,y una Copa del Rey que entre otras cosas produjo algo así como la estocada final a la era Mourinho al frente del equipo merengue. El entrenador de ese cuadro se llama Diego Simeone, el Cholo, portaestandarte de los rojiblancos en sus tiempos de mediocampista guerrero que lo distinguieron, además, como parte fundamental de la identidad de la selección argentina en los 90 y parte de la primera década del nuevo siglo.

Fundado en 1903, todos los futboleros del país ibérico reconocen a la hinchada del Atlético como una de las más fervorosas que tiene entre sus seguidores al canta-autor Joaquín Sabina, que apenas tiene ocasión en los escenarios homenajea sin reservas al equipo de sus amores, ese nombrado como el de los colchoneros a partir de 1911 por la similitud de la camiseta con las telas de las fundas de los colchones de la época.

Entre los acontecimientos de una rica historia figura la contratación del legendario entrenador argentino Helenio Herrera, que posibilitó la consecución de los títulos de liga de 1949 y 1950, y como dato colorido hay que recordar a Jesús Gil y Gil, que fue elegido en 1987 presidente del club y que se distinguió por una muy particular y estrambótica manera de dirigir al club que le granjeaba simpatizantes y detractores que lo situaron en el casillero de los excéntricos.

El Atlético de Madrid es inequívocamente el tercero en cuestión del fútbol español, y aunque estimulado por los últimos importantes trofeos obtenidos en las dos recientes temporadas, Simeone con los pies bien asentados sobre la tierra reconoce con toda madurez y honestidad que será muy difícil superar la vigente supremacía del Real y del Barça, asunto que por supuesto lo invita a seguir construyendo un equipo aplicado en el que se promueve la competencia interna entre todos los jugadores del primer plantel a objeto de mantener un estilo de juego que le permita seguir en la senda competitiva.

Para encarar la temporada 2013-2014 ha tenido que ser resonante la contratación de David Villa, que en la última temporada con la camiseta del Barcelona expuso un rendimiento irregular debido a una lesión que todavía no le permite ser ese endiablado goleador, especialmente protagonista de la selección española en los últimos cinco años y, por otra parte, para reforzar la línea de fondo se ha materializado la incorporación del argentino Martin Demichelis, procedente del exitoso Málaga que realizó una gran Champions League al mando del chileno Manuel Pellegrini.

Como muestra de su muy sólida cantera resulta ineludible citar la figura de Fernando El Niño Torres, que fue por varias temporadas goleador del equipo, con incidencia efectiva, además, en la selección dirigida por Luis Aragonés primero y ahora por Vicente del Bosque, tal como pudo advertirse en la última Copa Confederaciones recientemente disputada en Brasil.

Llegados de Sudamérica fueron también fundamentales las aportaciones del uruguayo Diego Forlán y ahora último del colombiano Radamel Falcao García, que ha sido transferido al Mónaco y que se constituye en uno de los cinco mejores delanteros del mundo, gracias al crecimiento que él mismo ha buscado y conseguido como el definidor de este Atlético de Madrid que cuenta en su banquillo con este Diego Simeone, que a diferencia de varios de sus compatriotas, es un entrenador extranjero ganador que algún día pretende dirigir a la selección de su país.

Julio Peñaloza Bretel es periodista y asesor de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF)

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