Los grandes estrenan técnico
Este fin de semana comienza en España e Inglaterra la competencia mayor de fútbol. Los equipos favoritos tienen algo en común: todos han cambiado a su DT.
La Liga española y la Liga Premier de Inglaterra de fútbol, dos de los torneos más importantes de Europa, arrancarán este fin de semana con algo en común: los equipos considerados favoritos estrenarán técnico, iniciando en todos los casos un nuevo proceso.
En España, el Barcelona defenderá el título tras un verano plagado de contratiempos, y el Real Madrid aparece muy animado por una serie de buenas noticias. Ambos clubes, ganadores de las nueve últimas ligas —sin dejar nada para el resto—, cambiaron DT, aunque cada uno dentro de un contexto muy diferente.
El nuevo técnico del Real Madrid, el italiano Carlo Ancelotti, ha llegado con la aureola de su título de campeón de la liga francesa con el París Saint-Germain, y ha prometido una temporada de alegrías tras las innumerables polémicas de la era Mourinho, ahora en el Chelsea inglés.
El cambio fue más delicado en Barcelona, donde a mediados de julio Tito Vilanova se vio obligado a partir por la reincidencia de su cáncer de la glándula parótida. La rápida contratación del argentino Gerardo Tata Martino todavía no ha disipado las inquietudes en un club acostumbrado a ganar casi todo en los últimos cinco años, en los que sumó cuatro ligas (2009, 2010, 2011, 2013) y dos Ligas de Campeones (2009, 2011).
Y como hay pocos equipos en la Liga que parezcan capaces de impedir un nuevo título del Real Madrid o el Barça, el resultado parece depender mucho de la rapidez con la que Ancelotti y Martino marquen la diferencia.
En Inglaterra, el Manchester United, campeón de la temporada pasada, lo tendrá muy difícil en esta Premier League para conservar su corona ante el Chelsea de Mourinho, el Manchester City, reforzado por su nuevo entrenador Manuel Pellegrini, y otros pretendientes como el Liverpool, el Arsenal y el Tottenham.
Por primera vez en 27 años, el Manchester United jugará sin tener en el banquillo al legendario Alex Ferguson, retirado y reemplazado por David Moyes, extécnico del Everton. La partida de Ferguson, que antes de irse le dio al Manchester United su 20ª liga, es una revolución para toda una generación acostumbrada a él. Sin el escocés, capaz durante todos estos años de guiar y sacar lo mejor del equipo, la dinámica ya no es la misma, y Moyes genera un gran escepticismo.
En la misma ciudad de Manchester, los “Citizens” mientras tanto se frotan las manos. El chileno Pellegrini, que llegó este verano europeo proveniente del Málaga y sucede a Roberto Mancini, se ha mostrado muy convincente en pretemporada, dándole solidez a su plantel y fichando a jugadores como los sevillistas Álvaro Negredo y Jesús Navas.
Más al sur, en Londres, también predomina el optimismo, donde el Chelsea ha vuelto a llamar al portugués José Mourinho, diez años después de su primer paso por el club, para intentar ganar de nuevo la Premier League después de tres temporadas de estar como segundones.
Con el regreso de Mourinho, los Blues recuperan un jefe que echaron de menos con André Villas-Boas, Di Matteo y Rafa Benítez durante estos tres últimos años, a pesar de los éxitos europeos cosechados.
Gerardo Martino
El Tata Martino tendrá que reconstruir la defensa del Barcelona, y sobre todo hacer convivir armoniosamente al astro argentino Lionel Messi con Neymar, el nuevo ídolo del fútbol brasileño.
Carlo Ancelotti
Para conquistar al público, Carlo Ancelotti —aparte de buscar la Liga— deberá regalarle al Real Madrid su décima Liga de Campeones, título que el equipo blanco no gana desde 2002.
David Moyes
De momento, Moyes ha fracasado en su ambición de fichar a nuevas estrellas: Alcántara, Cesc Fábregas, Leighton Baines, Robert Lewandowski, y en su intento por retener a Wayne Rooney.
Manuel Pellegrini
El chileno Pellegrini llegó proveniente del Málaga y sucede a Roberto Mancini. En la pretemporada le dio solidez a su plantel y fichó a jugadores como los sevillistas Negredo y Navas.
José Mourinho
Mourinho inicia su segunda etapa en el Chelsea dispuesto a asaltar no sólo la Premier, que ya ganó en 2005, sino la Champions que se le resistió en sus cuatro primeros años como blue.