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‘El hincha debe apoyar, más no puede hacer’, dice

Jorge Eduardo rememora nombres de jugadores que fueron bolivaristas y los mezcla. Considera que ellos y muchos otros fueron baluartes del equipo celeste: “Roger Wills, Mario Rojas, Marco Antonio Etcheverry, Milton Melgar, Carlos Borja, Julio César Baldivieso y actualmente Rudy Cardozo. Es decir hay muchos más. Es que Bolívar siempre se caracterizó por tener grandes jugadores”.

“Desde chico ha sido mi club, el Bolívar, al que le agradezco por tantas alegrías. Además, es la institución deportiva más grande del país, la más ganadora y es el club boliviano más reconocido a nivel internacional y también más representativo del país”.

Como todo bolivarista, esperaba que el conjunto celeste diera el anterior domingo la vuelta olímpica como campeón del torneo Apertura de la Liga. Sin embargo, el trofeo se le escapó de las manos y fue a parar a las del rival de siempre, The Strongest.

“Bolívar debió ser el campeón, porque hizo un buen trabajo, fue el mejor de todos los equipos. En cuanto a nuestro tradicional rival, eso es harina de otro costal. Lo que hizo Oriente Petrolero al jugar con equipo alterno (en la parte final del campeonato) es una gran chacota, esa clase de directivos están destrozando el fútbol nacional”, reniega.

En todo caso, se siente “feliz” porque la Academia fue campeón durante el primer semestre del año, además “tiene más títulos que cualquier otro” y con especial cariño recuerda que fue el equipo subcampeón (el mayor logro internacional celeste) de la Copa Sudamericana en 2004.

Y a pesar de la pérdida de la corona hace unos días, ratifica su respaldo a Bolívar: “Un hincha siempre debe brindar su apoyo, porque más no puede hacer”. Jorge Eduardo va casi siempre al estadio cuando juega Bolívar. Se pone su camiseta celeste y la luce ubicado en una de las graderías del sector de preferencia.

“Bolívar siempre fue un gran campeón, el más grande de todos los tiempos en el fútbol boliviano, y hoy está mucho mejor. Creo que necesitaba una inyección económica y ésta lo está fortaleciendo”, agrega, en alusión a la llegada, hace ya unos cinco años, de BAISA SRL., la empresa que administra al club.

“Toda inyección en la vida es importante, porque los cambios siempre son revitalizadores. Nadie va a negar hoy en día que la institución es la más regular en sus obligaciones con los jugadores, cuenta con un equipo que se maneja de forma muy profesional en todos los aspectos, y todo eso es porque BAISA le ha dado la posibilidad de ser más organizado y más profesional”.

Los retos para la Academia no paran. En enero comenzará el torneo Clausura liguero y en febrero será el turno de su participación en la Copa Libertadores. “Nos ha tocado un grupo muy fuerte, pero vamos a pelear”, dice a propósito de rivales como Flamengo de Brasil, León de México y Emelec de Ecuador.

‘Los dirigentes tienen poca valentía’

Es un cantante-futbolero. Le gusta ir al estadio, apoya a Bolívar y también a la selección. En general reniega por cómo está el fútbol nacional. “Veo con mucha preocupación y también tristeza cómo hay personas que se han incrustado en los lugares ejecutivos, tanto en la Federación (Boliviana de Fútbol) como en la Liga, y no los quieren abandonar”.

Desde su punto de vista, “esos dirigentes están velando más por sus posiciones personales, por sus intereses, que por el fútbol boliviano, y así nuestro país nunca va a ser representativo a nivel internacional”.

En Bolivia “en general no hay divisiones inferiores, se le está haciendo un gran daño a la niñez y a la juventud” y todo eso parte “de la poca valentía que tienen los dirigentes en general, los de la Liga y los de las asociaciones, para cambiar las cosas”.

“Esos personajes no pueden mover bien las cosas, no saben elegir a sus autoridades. Esperemos que ahora que se fue Mauricio Méndez (de la presidencia liguera) las cosas se hagan de diferente manera y que los demás no sigan mirando de palco, calladitos, lo que otros están haciendo mal”.

Como boliviano le hubiera gustado que la selección se clasificara al Mundial de Brasil 2014; sin embargo, “debemos ser realistas, así como estamos no podemos y tampoco va a ser posible ir a Rusia 2018 si no hay cambios, si no hay mejoras en cuanto a las personas que guían nuestro fútbol. A partir de los cambios hay que realizar un proceso largo, porque no va a ser posible que consigamos los éxitos de la noche a la mañana”.