La ciudad de Curitiba fue ratificada ayer como una de las 12 sedes del Mundial de fútbol de Brasil 2014, anunció la FIFA, que días atrás lanzó un ultimátum por los atrasos en las obras del estadio Arena da Baixada.
“Curitiba es confirmada como sede de la Copa de 2014, basada en las garantías financieras, el compromiso de todas las partes y el progreso realizado” en los trabajos, afirmó el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, en su cuenta de Twitter.
Según Valcke, “será una carrera apretada contra el tiempo y el esfuerzo colectivo de todas las partes involucradas en Curitiba debe continuar a ritmo fuerte”.
La señal verde para la capital del sureño estado de Paraná, fronteriza con Argentina y Paraguay, vino luego de una nueva inspección que efectuó el consultor de estadios de la FIFA, el arquitecto Charles Botta. En Curitiba también se reunieron ayer representantes de la FIFA, de la Alcaldía y de la Gobernación de Paraná, según informó el alcalde Gustavo Fruet en su página de Facebook.