Luis Suárez, suspendido nueve partidos y cuatro meses de toda actividad relacionada con el fútbol por haber mordido a un rival en el Mundial de Brasil, no puede quedarse en el campo base de Uruguay, precisó este jueves la FIFA.
Suárez fue sancionado por morder en el hombro izquierdo al defensa italiano Giorgio Chiellini en el partido Uruguay-Italia del martes, que permitió a la Celeste acceder a octavos de final del torneo gracias a su victoria 1-0.
Uruguay jugará en octavos contra Colombia el sábado, un partido al que tampoco podrá asistir Suárez, ya que tiene prohibido la entrada a los estadios durante la duración de su sanción.