La selección suiza de fútbol derrotó a Honduras por 3-0 ayer en Manaos en el Grupo E, y se clasificó a octavos de final del Mundial de Brasil 2014, dejando fuera a Ecuador, que se va a casa. El extremo del Bayern de Múnich alemán Xherdan Shaqiri logró el segundo triplete del Mundial, después del logrado por el alemán Thomas Müller el 16 de junio ante Portugal.
Abrió el marcador a los cinco minutos con un potentísimo zurdazo desde fuera del área que entró por la escuadra hondureña, no falló en un mano a mano al borde del descanso (31) y solo tuvo que empujar el balón tras la tercera asistencia de su compañero Josip Drmic (71).
De esta forma, Francia acaba líder de la llave con siete puntos y se medirá a Nigeria en la siguiente ronda. Suiza, con seis, se enfrentará a Argentina. Ecuador, con cuatro y Honduras, sin unidades, eliminados.
Suiza arrancaba la jornada con un déficit de dos tantos en su balance goleador con respecto a Ecuador (-2 de los helvéticos por 0 de los sudamericanos), pero el empate de los de Suárez allanó el camino a la escuadra de Ottmar Hitzfeld.
Suiza salió al ataque desde el primer minuto, con la necesidad de una goleada en la mente de todos sus jugadores. Si Ecuador derrotaba a Francia, los helvéticos necesitarían de una victoria holgada ante Honduras y, con esa idea, arrancó el partido en Manaos.
Ya a los dos minutos Suiza rozó el gol con una gran acción de Josip Drmic por la izquierda que Shaqiri, la estrella del encuentro, remató a las piernas del portero Noel Valladares, héroe de los suyos a pesar del resultado. Con lo que nadie contaba era con la maravilla que se inventó Shaqiri tan solo 180 segundos después: el extremo agarró el esférico en la derecha, eludió a un zaguero, se perfiló y lanzó un disparo con la izquierda que reventó el larguero antes de superar la línea y tocar las mallas. Uno de los mejores tantos del Mundial por su belleza y su plasticidad observada.
Suiza festejaba pero no se conformaba. Tenía prisa por seguir ampliando su ventaja y lo logró de nuevo a la media hora de juego con un contraataque fulgurante. De nuevo Drmic asistió y, otra vez, apareció Shaqiri para definir con clase.
La diferencia pudo ser incluso mayor si Drmic hubiera estado más acertado de cara a portería en dos ocasiones (43, 46). Generoso en asistencias, el ariete helvético se mostró errático ante el arco. “No estuvimos a la altura. En la primera parte nos faltó intensidad y, cuando nos despertamos, ya íbamos perdiendo 2-0. En la segunda parte jugamos mejor, tuvimos tres o cuatro ocasiones pero no faltó marcar”, dijo Luis Fernando Suárez, seleccionador de Honduras, que luego anunciaría su partida.
Los datos
Vino
“Estoy orgulloso del equipo, ya que sin el equipo no podría haber marcado tres veces. Quizá podamos beber una copita de vino”, afirmó el goleador suizo Xherdan Shaqiri.
Rival
“Ahora Argentina (en octavos de final) es un sueño para no- sotros. La pequeña Suiza frente a una conquista formidable”, aseguró Shaqiri, el volante del Bayern de Múnich.