Brasil sin su Neymar Superstar
Neymar se despide del Mundial con cuatro goles y cinco partidos, además de múltiples asistencias. Y ahora Brasil juega el martes contra Alemania sin su principal jugador.
Sobre sus hombros cargaba las esperanzas de todo Brasil y de todo el equipo: es Neymar, el ‘nuevo Pelé’, el ‘Superstar’ que ahora está fuera del Mundial.
En Brasil jugó su primera Copa, pero una falta en la clasificación a la semifinal lo dejó fuera del torneo. Una fractura en una vértebra interrumpió un sueño de niño.
Estatus de estrella de rock con múltiples contratos comerciales, Neymar, el ostentoso atacante de 22 años con brillantes en las orejas y cresta teñida de rubio platino, es el tema en todas las redes sociales.
En Twitter, la etiqueta #ForçaNeymar es uno de los ‘trending topics’ (temas más comentados) en la noche del viernes con cientos y cientos de mensajes de apoyo al crack de la Seleçao y menciones a su cuenta @neymarjr.
Neymar se despide del Mundial con cuatro goles y cinco partidos, además de múltiples asistencias. Y ahora Brasil juega el martes contra Alemania sin su principal jugador.
No será su última Copa. A sus 22 años, el futuro del jugador del Barcelona se pronostica aún brillante.
Y de Brasil-2014 Neymar ya guarda varios goles para el recuerdo: suyos son el primer tanto para Brasil de este Mundial-2014, el que anotó en el minuto 29 del partido inaugural contra Croacia en Sao Paulo, y el número 100 del campeonato, el primero de los dos que marcó ante Camerún.
Ese primer gol contra Camerún también coincidió con el partido número 100 de la Canarinha en la historia del torneo y devolvió las esperanzas a la afición brasileña que tanto esperaba del propio Neymar y de la selección anfitriona. Ahora Luiz Felipe Scolari debe pensar en cómo sustituir lo insustituible.
‘Neymarketing’
Ya desde antes de que comenzara el Mundial, los comerciales con el atacante de moda estaban por todos lados. Neymar y tal vez su entrenador, Luiz Felipe Scolari, son las figuras más cotizadas de la publicidad brasileña hoy.
Si algo heredó Neymar de Pelé es esa facilidad ante las cámaras. El ‘menino’ no tiene vergüenza y por una enorme cantidad de dinero puede salir, por ejemplo, modelando semidesnudo para vender calzoncillos.
El fenómeno Neymar sale definitivamente del campo. Los niños y jóvenes piden «un Neymar» al peluquero y quieren vestirse como su ídolo, mientras las chicas gritan incontrolables y febriles al verlo pasar.
Su vida privada es siempre tema de los medios y las redes sociales: fotos con su pequeño hijo o su última relación con la joven actriz Bruna Marquezine, con quien se ha dejado ver por la concentración de la selección en Teresópolis (estado de Rio) para deleite de la prensa rosa brasileña.
Además de ser calificado como el «futuro Pelé» por la revista Times en febrero, fue elegido en 2013 por segundo año consecutivo por la revista estadounidense Sports Pro como el deportista con mayor potencial de mercadeo del mundo, por delante de Messi y del golfista irlandés Rory McLlroy.
El peso de la Seleçao
De niño, este hijo de un futbolista profesional pedía siempre un balón de fútbol en su cumpleaños. Ya entonces mostraba una técnica alucinante en el fútbol sala.
Descubierto en un torneo escolar, firmó a los 13 años su primer contrato con el Santos en 2004. Salario: 450 reales (unos 225 dólares hoy), de los que sus padres pagaban un décimo a una iglesia evangélica.
Este joven desgarbado, de 1,74 metros y 58 kilos, se convirtió en jugador profesional a los 17 años, en 2009, y su juego ha dejado a más de uno boquiabierto.
Además, consiguió el premio de la FIFA al mejor gol de 2011, ya estuvo nominado al Balón de Oro y fue nombrado Mejor Jugador de la Copa Confederaciones en 2013.
En el Santos -su club desde las categorías de base- y en la selección es protagonista, pero en el Barça su papel es de actor secundario, a pesar de que su polémico fichaje superó los 86 millones de euros y llevó al club hasta la justicia.
Brillar al lado de Lionel Messi, ganador de cuatro Balones de Oro, no es tarea fácil. Marcó 17 goles y dio 12 asistencias, pero el brillo que tenía en el Santos aún no se vio de azulgrana.
Hábil y veloz, los regates de Neymar son una especie de baile, que terminan humillando a los defensores.
Tiene, no obstante, una tendencia incorregible a caerse por nada, para simular una falta en contra.
Todo Brasil lleva décadas imaginando a su selección levantando la Copa por fin en el Maracaná. Sin Neymar el sueño se complica.