Costa Rica, la selección más sorprendente de todo el Mundial, intentará convertirse en un equipo legendario ganando en cuartos de final frente a Holanda, uno de los favoritos que espera aproximarse a su cuarta final del torneo. Los ticos no descansan y quieren más. No se conforman con haber llegado a una ronda que nunca habían alcanzado en mundiales en los que participaron.
Y es que después de dejar atrás al conjunto griego, Costa Rica va por Holanda. Nada es imposible y quieren demostrar que no son unos simples invitados simpáticos a una eliminatoria en la que no son los favoritos. Sin embargo, el equipo de Louis Van Gaal, seleccionador de Holanda, tiene que tener cuidado.
En el camino hacia los cuartos, Costa Rica cosechó resultados increíbles. Ganó a dos campeones del mundo (Uruguay e Italia), empató contra otro (Inglaterra) y mandó a casa al campeón de la Eurocopa de 2004 (Grecia). El técnico colombiano tendrá que afrontar el encuentro con un par de bajas, la del sancionado Óscar Duarte y la del lesionado Roy Miller.
Pinto podría utilizar a Johnny Acosta para sustituir a Duarte en el centro de la defensa. El central del Alajuelense perdió la titularidad antes del Mundial en favor de su compañero y ahora podría participar en su segundo encuentro. Sustituir a Miller no será tan complicado, ya que solo jugó contra Inglaterra.
Esas son las malas noticias para Pinto, que, sin embargo, sí podrá contar con sus principales tres estrellas. El héroe de octavos, Keylor Navas, se ha recuperado de algunas molestias en un hombro y volverá a defender la portería, mientras que Bryan Ruiz y Joel Campbell serán los jugadores de campo más peligrosos.
Holanda. Louis Van Gaal, que no quiere que sus jugadores se confíen ante un equipo teóricamente inferior. La Naranja Mecánica ya sabe lo que es pasarlo muy mal contra selecciones de menor rango que pusieron contra las cuerdas a los hombres del técnico holandés.
Fue el caso de México en octavos, cuando Wesley Sneijder empató (87’) un encuentro que acabó en victoria para los europeos con un penal que hasta ahora es bastante discutido. La tensión de esa eliminatoria fue muy grande y el esfuerzo pasó factura. Psicológicamente, algunos jugadores se han visto envueltos en alguna polémica, como es el caso de Arjen Robben, acusado de “piscinero” por haberse tirado en la pena máxima que dio la victoria a Holanda.
La carga mental y la presión a la que son sometidos estos futbolistas que anhelan repetir la final de Sudáfrica para intentar ganar su primer Mundial es grande. Pero también la física y eso lo han notado ya varios futbolistas.
El primero de ellos, Nigel De Jong, que con un tirón en su muslo derecho tuvo que abandonar en la primera parte el duelo contra México. No podrá estar ante Costa Rica y su lugar en el centro del campo lo podría ocupar Giorginio Wijnaldum.
Otros como Leroy Fer, con molestias en su muslo, y Wesley Sneijder, con varios golpes, sí que estarán finalmente disponibles para Van Gaal, que duda en el lateral derecho. Daryl Janmaat, titular en los tres partidos de la primera fase, se vio relegado a la suplencia por Paul Verhaegh.
El dato
Primera vez
La única vez que ticos y holandeses jugaron en un Mundial fue en el Sub-20 de Argentina 2001, la “Oranje” —de Louis Van Gaal como DT y con Robben y Jan Huntelaar como jugadores— cayó por 3-1.
Dupla
Guiada por el volante fenomenal Bryan Ruiz y el explosivo punta Joel Campbell, los costarricenses apuestan a imponer su buen fútbol y orden táctico disciplinado.