Wilstermann y el colombiano Deportes Tolima librarán un partido al todo o nada hoy desde las 20.30 en Cochabamba por el Grupo G de Copa Libertadores, donde ambos colistas de la llave aún sueñan con un boleto a los octavos.
Para que ello ocurra en esta jornada, el conjunto cochabambino o Tolima (ambos con 5 puntos) debe ganar y esperar que Boca Juniors (8) fracase en La Bombonera ante el brasileño Paranaense (9), líder de la serie, quienes también esta noche se enfrentan.
Como en fútbol jugar con probabilidades es arriesgado y un negocio a veces inseguro, ambos colistas podrían quedarse con los sueños quebrados si en Buenos Aires argentinos y brasileños pactan un empate o si gana el xeneize del DT Gustavo Alfaro.
El adagio del practicante de cualquier juego, especialmente de azar, es ése, razón por la que Wilstermann y Tolima solo piensan en un triunfo para seguir en liza y mejor que Boca caiga en su reducto.
El pijao colombiano y el aviador boliviano, que despidió en medio camino a su timonel español Miguel Ángel Portugal, buscan una victoria, pues, aunque no avancen en la Libertadores, el ganador tendrá el consuelo de agarrar boleto a la Sudamericana, que le permitirá embolsar 350.000 dólares, un bálsamo para cualquier arca.
Wilstermann llega al juego con más dudas que certezas: en el torneo doméstico de primera división está quinto sin ninguna esperanza de título y, peor, con un técnico alterno, Norberto Kekez, reclutado de emergencia tras la salida de Portugal.
Wilstermann parece haber perdido empuje en los últimos tiempos, aunque sus delanteros Gilbert Álvarez y Ricardo Pedriel siempre se dan modos para inflar las redes del arco rival.
Tolima, que advirtió que pondrá dos delanteros para liquidar el cotejo, jugará todas sus cartas. Tras el choque en tierras bolivianas, mutará el chip al cuadrangular final colombiano de fin de semana que abrirá contra el Cali, en una llave en la que también están sembrados Junior y Atlético Nacional.
El cuadro cochabambino seguramente recuperará para este lance a su puntilloso mediocampista brasileño Serginho, quien es uno de sus armadores del juego boliviano, y al volante Fernando Saucedo, destacado polifuncional de marca y salida, ambos ausentes en el compromiso de liga del fin de semana pasado ante Guabirá, que empató 1-1 cuando podía ganar con comodidad.
Mientras, los pijaos lamentarán la ausencia de Juan Guillermo Arboleda por acumulación de cartones amarillos.
En todo caso, los colombianos llegan a tierra cochabambina decididos a jugarse la posibilidad de lograr al menos un cupo a la Copa Sudamericana, más aún con la sed de revancha del empate que les infringieron. (09/05/2019)