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El Tigre aguó parte de la fiesta celeste

La fiesta por el título fue de Bolívar, pero el clásico le favoreció a The Strongest, que se impuso por 3 a 1 y además en lo futbolístico se dio el gusto de ser mejor que el flamante campeón, ayer en el estadio Hernando Siles por la jornada 25 —la penúltima— del torneo Apertura.

El partido no era definitorio por los puntos porque ya todo estaba decidido y el trofeo esperaba a la Academia, aunque estaba en juego el honor que siempre se juega entre tradicionales rivales; por eso, la victoria de alguna manera minimizó la decepción stronguista por haber perdido la corona del primer certamen del año.

El Tigre no estaba dispuesto a ceder nada en esta fecha especial para su oponente y por eso desde el comienzo fue más ambicioso en ataque y protagonizó 20 minutos en los que tuvo dos o tres chances, la más clara se la “comió” Rudy Cardozo al cabecear alto en la puerta del arco tras un buen centro de Dany Cure.

La porfía ofensiva atigrada dio su primer fruto a los 31 minutos, una buena internación por izquierda de Cardozo, quien después de deshacerse de la marca de Carlos Gómez mandó un centro medido para que Henry Vaca empujara la pelota adentro (1-0).

Poco después llegó el segundo, originado en una mano de Mauricio Prieto en su área, un penal que Jair Reinoso cobró a los 35 rematando con virgor hacia la derecha de Saidt Mustafá (2-0).

Bolívar se sintió herido y fue a buscar el gol del descuento, obra de Erwin Saavedra a los 38, luego de una buena acción de Jorge Pereyra (2-1); entonces el clásico recobró emotividad.

La segunda mitad fue más parecida a un clásico luchado, la Academia no quería festejar su título con una derrota y menos a manos del Tigre, entonces se hizo un partido de ida y vuelta con una media hora intensa y oportunidades de gol para los dos.

Reinoso se perdió el tercero de The Strongest, Cure también tuvo dos chances casi calcadas tapadas por Mustafá; pero también Marcos Riquelme desperdició en un par de jugadas lo que pudo ser el empate de Bolívar.

El latigazo final sobre el campeón llegó a los 33, un tiro de esquina de Cardozo que halló la solitaria cabeza de Fernando Marteli para poner el 3 a 1 y darle al Tigre su festejo íntimo en medio de la mayoría académica que colmó el Siles.

Bolívar no pudo maquillar su caída ni con un hombre menos de The Strongest por la expulsión de Maximiliano Ortiz, mientras Juan Miguel Callejón erraba la última chance a tres minutos del final, que supuso un trago amargo para el equipo más ganador del fútbol boliviano.