Peinado, la ciclista que renace en BMX
Estuvo a punto de retirarse a su corta edad por falta de apoyo para ir al Mundial de Zólder, Bélgica (del 23 al 27 de este mes).
La cruceña María Alejandra Peinado Pizarro (3 de mayo de 1997) es una de las mejores bicicrosistas del país. Estuvo a punto de retirarse a su corta edad por falta de apoyo para ir al Mundial de Zólder, Bélgica (del 23 al 27 de este mes), pero gracias a una ayuda inesperada no solo competirá en la cita internacional en la categoría Élite, sino que su sueño de clasificarse a unos Juegos Olímpicos renació y está más fuerte que nunca.
El 22 de junio, la pedalista de 22 años publicó en su cuenta personal de la red social Facebook que por falta de respaldo económico no iba a poder asistir al Mundial pese a que tocó “muchas puertas” para buscar apoyo en pos de cubrir sus gastos.
También mencionó que tomó la decisión de “seguir estudiando y terminar mi carrera lo más pronto posible” y dejar a un lado su “sueño de llegar a unas Olimpiadas”.
Su mensaje se volvió viral inmediatamente tomando en cuenta que ella y la boliviana Anna Rojas consiguieron los dos cupos mundialistas para el país en Élite Damas.
Gracias a la gran repercusión que tuvo su recado, esto llegó hasta oídos de algunas autoridades bolivianas que decidieron no solo apoyarla a ella, sino también a otros dos ciclistas que tenían el mismo problema: Sebastián Arze y María Enríquez.
El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, y la ministra de Planificación del Desarrollo, Mariana Prado, se contactaron con los tres bicicrosistas y se comprometieron a cubrir los gastos de cada uno, que asciende a unos 5.000 dólares, que consta de los pasajes, estadía, alimentación, alquilar un vehículo en Bélgica —la pista está bastante lejos de la ciudad—, y otros.
“Estoy muy feliz por esta ayuda, no me la esperaba, es un sueño cumplido. Mis dos compañeros y yo estábamos muy desanimados porque pensábamos que no íbamos a poder lograrlo, pero ahora estamos muy contentos”, indica María, quien a sus 9 años pasó del atletismo al BMX luego de ver a su hermano mayor Wilson practicar sobre las dos ruedas.
“Me gustó mucho cuando vi el bicicross, porque me encanta la adrenalina, las cosas extremas”, recalca la pedalista que a partir de ese entonces sumó éxito tras éxito hasta ser siete veces campeona nacional en diferentes categorías y haber participado en tres mundiales: Canadá 2007 (fue tercera en 10 años), Bélgica 2015 y Estados Unidos 2017.
La noticia de que viajará a Zólder le cayó muy bien, ya que la semana pasada se impuso en la segunda fecha del Campeonato Nacional y del Open Copa Bolivia de BMX que se realizó en Santa Cruz.
Ahora está enfocada en el Mundial de Zólder, donde por segunda ocasión participará en la categoría Élite —la primera fue en 2017— por méritos propios.
Para clasificarse a un torneo de este tipo los pilotos de Élite deben ganar puntos en el ranking mundial y los consiguen en base a su participación en diferentes campeonatos avalados por la Unión Ciclista Internacional (UCI).
Eso hicieron María y Anna, quienes corrieron en Francia, Ecuador, Brasil, las fechas de la Copa Latinoamericana y pruebas nacionales como en Sucre y Santa Cruz que fueron habilitadas por la UCI.
Sumaron unos 300 puntos y le dieron a Bolivia dos cupos. Este es un gran logro porque en otras naciones sus equipos están conformados por hasta seis ciclistas.
“Iré al Mundial con el objetivo de pasar las eliminatorias y llegar lo más lejos posible”, señala la cruceña.
María, quien cursa el primer año en la carrera de Odontología de la Universidad Franz Tamayo, tiene muchos objetivos dentro del BMX: “ser campeona latinoamericana y panamericana”, pero su más grande anhelo es competir en los Juegos Olímpicos.
“Quiero llegar a unas Olimpiadas. Quiero obtener la clasificación y después conseguir una medalla”, dice la ciclista.
- Igor (izq.), Marcos, María, Wilson, José, su padre Ernesto y su madre Ross Mery. Foto: María Peinado
De una familia de atletas
Si bien la pasión de María Peinado por el BMX nació a través de su hermano mayor Wilson, el cariño por el deporte proviene de su familia, ya que todos practican o se dedicaron por lo menos a una disciplina.
“Vengo de una familia de deportistas. Hubo un tiempo en que todos mis hermanos y yo (son cinco en total) practicábamos BMX”, cuenta.
Sus hermanos José (de 28 años), Marcos (27), Wilson (23) e Igor (21) eran unos apasionados por las dos ruedas, pero en los últimos años los tres menores, incluyendo a María (22), son los que actualmente se dedican a esta disciplina.
Lo que no se queda ahí, ya que sus padres Ernesto y Ross Mery también son aficionados por la actividad deportiva.
“Mis padres hicieron deporte cuando eran jóvenes, así que viene de sangre ser amantes del deporte. Mi papá conoció el bicicross, también hizo karate y fútbol, mientras que mi mamá hizo básquetbol, voleibol y atletismo”, detalla la pedalista.
Al tener una familia dedicada a la actividad física los logros de María son un “orgullo” para sus padres y hermanos. “Recibo mucho apoyo de todos ellos, eso me pone muy feliz”, sostiene.