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Viloco, la tragedia que enlutó al Tigre y al país

Desde 1969, para el club The Strongest septiembre es especial, no por la conquista de uno de sus tantos títulos en torneos de la Asociación de Fútbol de La Paz (AFLP) o de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), sino por una tragedia: el viernes 26 —hace casi 50 años— ocurría el accidente aéreo de Viloco, en el que murió casi todo el primer plantel atigrado, sembrando luto en el fútbol y en el deporte boliviano.

La delegación atigrada retornaba de Santa Cruz de la Sierra, donde había participado en un torneo cuadrangular internacional por invitación de la Asociación Cruceña de Fútbol (ACF) en homenaje a la efeméride departamental (24 de septiembre). El avión del Lloyd Aéreo Boliviano se estrelló en la cordillera de Los Andes, en el sector denominado La Cancha, cerca de la población minera de Viloco.

Versiones de la época dicen que los integrantes de la delegación y el resto de los pasajeros abordaron la aeronave Douglas DC-6B del LAB – 92 a las 14.10 en la terminal aérea de El Trompillo de Santa Cruz y sus operadores reportaron una hora y 20 minutos después (15.30) a los aeropuertos de Cochabamba y La Paz que perdieron contacto.

Murieron las 74 personas que se encontraban en el avión, cinco miembros de la tripulación y 69 pasajeros, 20 de ellos de la delegación de The Strongest.

Los atigrados que perdieron la vida fueron: José Ayllón Guerra (dirigente), Eustaquio Ortuño (director técnico), Felipe Aguilar (utilero), Armando Angelacio, Orlando Cáceres, Hernán Andretta, Juan Iriondo, Miguel Ángel Porta, Jorge Tapia, Julio Alberto Díaz, Óscar Guzmán, Héctor Marchetti, Óscar Flores, Raúl Farfán, Diógenes Torrico, Fernando Durán, Osvaldo Franco, Eduardo Agustín Arrigó, Germán Alcázar y Ernesto Villegas (jugadores).

Se salvaron el entonces presidente Alberto Alarcón, quien viajó a Santa Cruz pero no volvió con la delegación, y los jugadores Rolando Vargas, por un permiso para ocuparse de asuntos de trabajo, el paraguayo Luis Gini y el cruceño Marco Antonio Velasco, quienes estaban lesionados.

El último partido que jugó ese equipo en un torneo oficial antes de viajar a Santa Cruz fue el del 20 de septiembre frente a 31 de Octubre por la novena fecha de la segunda rueda del torneo de la Primera A de la AFLP y fue derrota por 1-0.

El aurinegro, con 7 puntos en 9 partidos, ocupaba el sexto puesto entre 8 participantes. Entonces los campeonatos paceños se disputaban en tres ruedas.

Tras ese cotejo, según datos de Ariel Sanjinés Díaz (comunicador social y estadístico), en su libro Números en Amarillo y Negro 1950-2018, el club recibió la invitación de la ACF para jugar el cuadrangular junto a Blooming, un combinado de jugadores locales y Cerro Porteño de Paraguay.

En su primer partido, el martes 23, el gualdinegro perdió por goleada frente a Cerro 3-0 y dos días después —jueves 25— cayó frente al combinado local por 4-0.

La delegación debía volver el sábado 27, pero por falta de cupos la aerolínea habilitó un vuelo especial para ese fatídico viernes 26.

The Strongest tenía que enfrentar el domingo 28 a Mariscal Santa Cruz pero, tras conocerse la tragedia, el Consejo Central de la AFLP en una reunión de emergencia declaró al club The Strongest “Campeón de Honor”.

En la misma sesión se determinó con carácter excepcional que el torneo se reducía a dos ruedas sin descenso.

Tras la tragedia y después de enterrar a los “Mártires de Viloco”, como se los denominó, la dirigencia de The Strongest afrontó la difícil misión de reconstruir su club y para ello fue gran artífice Rafael Mendoza Castellón, el mejor presidente de la historia gualdinegra.

La solidaridad de entidades nacionales y también del exterior, fue notable; entre otras, de los dos clubes más grandes de Argentina: Boca Juniors y River Plate. El nuevo plantel atigrado fue bautizado como “The Strongest Símbolo”. Pero esa ya es la otra parte de la historia.