Jorge Pereyra será tratado de su lesión con infiltraciones. De esa manera podría descartarse una intervención quirúrgica o una artroscopia. Pero ahora, en Bolívar analizan la posibilidad de enviar al exterior al delantero argentino, específicamente a Chile o Argentina, o que la labor médica se realice en el país.
No hay un diagnóstico oficial sobre lo que el jugador tiene. Hace unos días, un comunicado del club habló de una molestia en la rodilla. Además, todavía no hay el informe —o es guardado en reserva— acerca de los estudios a los que fue sometido.
Hay una idea: se trata de un síndrome articular que compromete la parte de los ligamentos, con probable compromiso óseo en su rodilla derecha.
Pereyra, uno de los goleadores del plantel que dirige el entrenador argentino César Vigevani, está a la espera de un nuevo control y a partir de ahí definir junto con el cuerpo técnico y médico de la Academia el tratamiento que podría seguir.
Las infiltraciones podrían ayudarle a que mejore en un lapso de una semana. El hecho de que el torneo Clausura esté parado ayuda sobremanera a los planes. No se descarta, sin embargo, que su recuperación dure más.
El problema que tiene el argentino le provoca una inestabilidad y otras molestias físicas. Su recuperación en este tiempo en que está parado el certamen ha sido escasa. El jugador tampoco quiere hablar del tema.
La semana pasada fue sometido a una resonancia magnética que, en apariencia, descartó la necesidad de una cirugía. Pero si el tratamiento aconsejado no funciona se recurrirá a la artroscopia de limpieza.
Con nueve goles convertidos en el torneo Clausura de la División Profesional, Pereyra es el segundo anotador de la Academia, detrás del español Juan Miguel Callejón. Su último tanto lo hizo el día que también sintió las molestias, en la goleada a Guabirá (7-2). Desde entonces no realizó el mismo trabajo que el resto del plantel.
Es más, no asistió a la práctica de ayer porque se entrevistó con unos especialistas para que le expliquen el alcance de su dolencia.
El hecho de que no haya actividad competitiva le juega a favor, caso contrario ya se habría perdido cuatro jornadas del campeonato.
Junto a Pereyra, el atacante Luis Alí es otra baja. En esta semana tendrá un nuevo control tras su cirugía de fractura de peroné y deberá esperar unas semanas más para volver a asentar el pie derecho y caminar a fin de darle movilidad a la articulación.
Los que ya se recuperaron de sus diferentes molestias son el delantero Vladimir Castellón, de una tendinitis en su rodilla derecha; el defensor uruguayo Mauricio Prieto, que superó la cefalea tensional migrañosa que lo tuvo durante un mes con tratamiento especializado; y el guardameta Guillermo Viscarra, quien desde hace dos semanas trabaja con el grupo luego de recuperarse de una cirugía en el hombro derecho.
(05/11/2019)