Icono del sitio La Razón

Wilstermann cumple 70 años sano y fuerte

Wilstermann cumplió ayer 70 años (24 de noviembre de 1949). Bien encaminado para obtener el título del torneo Clausura, en el que marcha primero, los quiere celebrar en grande. Además, ya es una realidad su casa nueva, un edificio en el centro de Cochabamba que lo estrenará en breve. Y como la idea de su gente es seguir creciendo, proyecta la construcción de un complejo deportivo, “el más grande del país”.

“Este aniversario, felizmente nos encuentra en un momento sano en lo deportivo y sano en lo institucional. Debemos continuar luchando para estar en la cima del fútbol boliviano”, dice su actual presidente, Grover Vargas.

Después de Bolívar y The Strongest es el tercer club con más coronas en el fútbol boliviano. En los últimos 40 años y pico ha obtenido seis desde la fundación de la Liga (1977); pero en los 30 anteriores ya era un campeón por las siete veces que se ciñó el título en el Profesionalismo (1950 a 1976).

En la primera de esas épocas fue campeón cuatro veces seguidas, algo que nunca ningún otro club boliviano pudo igualar: de 1957 a 1960 fueron sus primeros cuatro grandes logros.

“Jugó, sin duda, un fútbol poderoso, técnico y prácticamente invencible de la mano de un talento inigualable como Ausberto ‘Oso’ García.

Ese equipo de oro tenía a “Chive” Hurtado, Mario Zabalaga, José Rocabado, Arturo Soria, Ricardo Arnez, Ausberto García, Óscar Claure, Renán López, Rómulo Cortez, José Carlos Trigo, Máximo Alcócer y César Sánchez”, rememora el portal historiadelfútbolboliviano.com, del historiador Carlos D. Mesa Gisbert. Aparte, ganó las temporadas de 1967, 1972 y 1973.

Y cuando apareció la Liga, también tuvo dos años únicos, los de 1980 y 1981 con un bicampeonato aún recordado —de la mano del astro brasileño Jairzinho, para luego sumar los éxitos de 2000, 2006, 2010 y 2016. Su más reciente éxito lo obtuvo el año pasado (2018), campeón de la División Profesional.

En este 2019 está cerca de uno más, si acaso mantiene el primer lugar en el torneo Clausura, a falta de 10 jornadas para el final.

Fue el primer club boliviano en disputar la Copa Libertadores de América, en 1960. Además tuvo el privilegio de inaugurarla, pues jugó el primer partido de ese certamen ante el uruguayo Peñarol.

Desde entonces ha disputado 18 ediciones del torneo de clubes más importante del continente y va camino a su décima novena vez, que la jugará en 2020, ya que tiene asegurada su clasificación pase lo que pase en lo que falta por jugarse en la temporada doméstica, sea como campeón o vía tabla acumulada del año.

Wilster fue fundado con otro nombre: Deportivo LAB. “La historia del club está estrechamente vinculada a la del Lloyd Aéreo Boliviano, la empresa aérea de Bolivia triste e injustamente desaparecida en 2006, abandonada a su suerte por el Gobierno. El 24 de noviembre de 1949, Justo Mansilla, quien fue elegido primer presidente, Ernesto Salazar, Sixto Oquendo y Rogelio Zubieta, decidieron crear el club Deportivo LAB. Sus colores originales fueron el blanco y el celeste”, rememora historiadelfútbolboliviano.com

“En la primera mitad de los años cincuenta el presidente honorario del club, Walter Lehm (la figura central de su potenciamiento en sus inicios) propuso el cambio de nombre por el de Jorge Wilstermann en homenaje al piloto cochabambino que murió al accidentarse el avión Junkers ju 52 ‘Chorolque’ del LAB en 1936. En 1955 cambió las poleras albicelestes por las rojas que definirían la personalidad del equipo conocido popularmente, y por razones obvias, como ‘aviador’”, agrega.

Se fue al descenso en noviembre de 2010. No jugó en la máxima categoría en 2011, pero volvió con todo en 2012. A pesar de ese tropiezo nunca dejó de ser un grande del fútbol boliviano.

Vargas: ‘Hoy por hoy es un club estable’

Jaime Ayllón – La Paz

Una misa de Acción de Gracias acompañó ayer la llegada de los 70 años de Wilstermann. “Queríamos hacer un festejo más grande, pero Bolivia en este momento no está para eso, hoy hay que buscar la pacificación del país”, señala Grover Vargas.

El presidente afirma que Wilster es un club “con mucha historia, llena de orgullo y felicidad” por sus logros.

“Hemos vivido momentos de euforia y de tristeza. Hoy trabajamos por el club y le decimos a la hinchada gracias por todo”.

En lo deportivo está bien. Sus títulos más recientes (2016 y 2018) y el que está por conseguir lo demuestran así.

“Hay cosas importantes por realizar, haremos lo imposible para seguir haciendo grande al club. Creo que estamos muy bien en lo deportivo, también en lo institucional, pero debemos seguir trabajando con humildad y sacrificio para tener una institución sólida, con una buena base”.

Vargas está seguro de que aparte del patrimonio del club habrá una buena base para no pasar penurias en adelante, sino consolidarse en el tiempo.

“Hoy tenemos una parte económica estable y manejable. Si bien hay problemas en el fútbol boliviano, Wilstermann hoy por hoy es un club estable”.

En lo institucional “estamos trabajando calladitos, contamos con infraestructura, el edificio nuevo está listo y en enero daremos una sorpresa”, en alusión a un complejo deportivo.

“Creo que el que ama al club debe trabajar con unidad, paz y tranquilidad. La unidad hace la fuerza y está ocurriendo hoy en Wilstermann. Ojalá que tengamos mejores días y cumplir con muchas más aspiraciones”.