Al menos unos 500.000 bolivianos se le “esfumaron” al Servicio Departamental de Deportes (Sedede) de La Paz, dinero que esperaba obtener durante la segunda quincena de marzo por el alquiler del estadio Hernando Siles para los partidos de Bolívar vs. Palmeiras por Copa Libertadores y de Bolivia vs. Argentina, por las eliminatorias mundialistas.
Por la pandemia del coronavirus las actividades fueron aplazadas y las pérdidas también afectan al Sedede, que a su vez debe seguir invirtiendo por ejemplo en el mantenimiento del terreno de juego de Miraflores.
“Las pérdidas son muchas, no olvidemos que el Sedede se mantiene principalmente gracias a los ingresos por alquiler de sus instalaciones, vale decir, campos deportivos, quioscos, depósitos, eventos como conferencias o encuentros de índole comercial y la publicidad. “Todo está parado”, dijo Fernando Trino, director del Sedede.
En cambio, los gastos corrientes de agua, luz, gas, mantenimiento de campos de juego y salarios del personal “siguen corriendo y esto abarca un presupuesto muy importante”.
Trino confirmó que “mirando las estadísticas de los partidos de eliminatorias y particularmente el de Argentina se esperaba tener un ingreso por cerca de 300.000 bolivianos”. El partido iba a ser el debut de la Verde como local y estaba programado para el martes 31 de marzo, pero fue aplazado sin nueva fecha.
“De la misma manera, lo que es Libertadores, pues hablamos de unos 200.000, incluyendo los ingresos de los partidos del torneo boliviano que también fueron suspendidos”.
Si bien se trata de ingresos que de todas maneras van a llegar cuando se reanude la competición, el presupuesto para el primer semestre del año ya fue alterado con consecuencias.
En tanto, el Sedede sigue pagando “el mantenimiento del campo de juego, que es ineludible, ya que se debe cortar el césped tres veces a la semana sí o sí, además de darle los nutrientes y abono”. Si esos trabajados no se realizaran “tendríamos mayores problemas si al césped le ataca una enfermedad”.
La empresa a cargo está trabajando con la mínima cantidad de personal requerido, igual que ocurre en la piscina de Alto Obrajes y los escenarios de Alto Irpavi”.
“No olvidemos que los porteros y policías están trabajando de forma reducida, pero se debe custodiar estos escenarios. Además, hay que destacar también que cumplen un rol importante en esta etapa de emergencia sanitaria que vive el país”.
El coliseo de Alto Obrajes ya fue habilitado como alberge para personas en condición de calle y también serán habilitados Villa Victoria y el Julio Borelli, de ser necesario.
En los terrenos donde se ubica la piscina también está un hotel deportivo que tras su construcción nunca fue utilizado; ahora, la Gobernación del Departamento ha dado el visto bueno para su reacondicionamiento y equipamiento, “lo que será puesto al servicio de la sociedad en este momento difícil gracias a la voluntad del gobernador Félix Patzy”.
“Los administradores de los centros deportivos están trabajando con el mínimo del personal de custodia y limpieza, algunos es de sus casas en temas económicos y de proyectos que tenemos. La gente de la Clínica del Deporte está apoyando arduamente en el albergue y a disposición de cualquier emergencia que se les requiera, en este momento es la parte más importante de esta estructura al frente del doctor Jorge Limachi”, finalizó la autoridad.