The Strongest: Calero no sale de su casa hace tres semanas
El joven jugador atigrado cumple a rajatabla la cuarentena. Está en Santa Cruz, donde entrena con sus hermanos, quienes son los que van a realizar las compras cuando les corresponde.
Sin salir de su casa en Santa Cruz de la Sierra “para nada” y entrenando a diario junto con sus hermanos, Moisés Calero, una de las jóvenes promesas de The Strongest, pasa la cuarentena por la pandemia del coronavirus.
Calero (Santa Cruz, 9 de septiembre de 1998), igual que otros jugadores jóvenes del plantel, recibió la autorización del cuerpo técnico para viajar a la capital oriental y pasar la situación complicada junto con su familia.
Por las mañanas se conecta a los entrenamientos “grupales” que mediante teleconferencias realiza a diario el plantel atigrado.
Después de un descanso y de servirse el almuerzo inicia un trabajo extra junto con sus hermanos, uno mayor, Dennis, y el otro menor, Jhonatan.
Moisés cuenta que ninguno de ellos juega al fútbol profesional, pero realizan el trabajo físico para mantenerse en forma y también para participar de los torneos del barrio los fines de semana, que igual que toda actividad deportiva en Bolivia y en el mundo están paralizados.
Durante el trabajo “extra” los tres realizan abdominales, brazos, entre otras cosas, además de ejercicios de potencia. “Todo ayuda para mantenerse bien físicamente”.
El atigrado vive por el Kilómetro 9 de la Doble Vía la Guardia, así que tiene en su casa un patio que le permite realizar con toda comodidad los trabajos que pide el cuerpo técnico y los que realiza con sus familiares. “Tengo un espacio bastante grandecito y ahí es donde aprovecho para hacer mis ejercicios”.
Al margen, dispone de varios elementos para llevar adelante de la mejor manera las tareas.
Desde que se fue a Santa Cruz, hace más de tres semanas, no ha salido para nada, porque son sus hermanos quienes se encargan de hacer las compras en los días que le corresponde por la terminación de su carnet de identidad.
“No salgo para nada, hace tres semanas que estoy encerrado, como se debe”, puntualiza. Además cumple “al pie de la letra, lo mismo que todos en su familia, las normas que se han dado para evitar la propagación del coronavirus, desde el aislamiento social, hasta lavarse las manos constantemente, el uso de alcohol en gel y desinfectar las superficies” de su domicilio.
Su madre Virginia se encarga de hacer los alimentos diariamente “y siempre cocina sano”; además que toma muy en cuenta “el plan nutricional que nos hace llegar el médico del equipo”.
En sus momentos libres juega con los suyos y habla con algunos de sus compañeros del Tigre. “Con los que más hablo son (Carlos Enrique) Áñez y (José) Sagredo. Ellos están en La Paz, pero tenemos una buena amistad”.
También está en contacto con el técnico Alberto Illanes, con los preparadores físicos del club, y alguna vez dialoga con los miembros del cuerpo técnico de la selección nacional.
En las primeras 12 fechas del torneo Apertura, Calero ha tenido poca participación en el equipo, solamente jugó con Palmaflor en La Paz.
Las primeras fechas se las perdió porque integró la selección boliviana Sub 23 que participó en el mes de enero en el torneo Preolímpico de Colombia.