Esquiador que representa a Bolivia paga más de $us 300 al día por entrenar
Simon Breitfuss obtuvo el permiso para acceder al único glaciar habilitado en el mundo, ya que los demás están cerrados debido al coronavirus.
El esquiador austriaco-boliviano Simon Breitfuss obtuvo un permiso especial del gobierno de su país natal para entrenarse en el único glaciar habilitado en el mundo, pues los demás están cerrados por el coronavirus. Sin embargo, el costo de uso del mismo es alto, más de 300 dólares por día, así que espera recibir una colaboración.
“Me siento honrado de haber tenido la oportunidad para entrenar en la montaña (la Kaunertal Glaciar en Pitztal). Las condiciones de nieve actuales son perfectas. Debido a la situación del coronavirus con todas las restricciones esto no es fácil, es algo único”, declaró Breitfuss a Marcas de La Razón.
El esquiador europeo representa al país desde hace años y, entre otros eventos, llevó la bandera nacional a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pieonchang 2018, en Corea, como también se clasificó para los de Pekín 2022 (del 4 al 20 de febrero).
Breitfuss y su padre Rainer, quien es su entrenador, trabajan todos los días cerca del equipo profesional austriaco que también logró el permiso del Ministerio Federal de Austria.
“Otros países no pueden venir porque las fronteras están cerradas. La ley dice que solo los mejores atletas profesionales pueden entrenar. Normalmente es exclusivo para el equipo de esquí austriaco, pero debido a que el esquí de Bolivia y yo somos conocidos acá, y generalmente todas las personas de aquí son amables con los bolivianos, se nos dio igual a nosotros”.
Entrenamiento de Simon Breitfuss
El trabajo
Desde hace dos semanas su preparación comienza en la madrugada de cada día y termina a media mañana, lo hace con su padre, aunque cumpliendo las normas de distanciamiento social.
“El día comienza temprano. Me levanto a las 03.30, desayunó y conduzco una hora hasta el glaciar. Cuando llego mi padre y yo tomamos la moto de nieve con todo el equipo hasta la pista de entrenamiento, preparo el curso de eslalon, instalo el cronometraje, la radio y luego empiezo con el entrenamiento. Previo a ello hago el calentamiento”.
Su preparación consiste en dar entre 12 y 15 vueltas a una longitud de 800 metros en un tiempo de 43 segundos cada bajada. Esto lo hace para perfeccionar el estilo.
“El entrenamiento en el glaciar finaliza a las 11.00, voy a casa, almuerzo y luego hago el análisis en video y cronometraje con mi padre. Por las tardes hago de tres a cuatro horas de preparación física”.
Hay que pagar
“No es barato usar la montaña. Tengo que pagar al Ministerio Federal por el permiso y la pista, también está el boleto de entrada al cerro, el seguro y el permiso para el uso de la moto de nieve. Es una inversión de 275 dólares por día. A ello se suma el transporte, la gasolina para el automóvil y la moto de nieve, que es 60 dólares al día”, detalló.
Calcula que entrenará unos 25 días más con la idea de llegar en buenas condiciones a la Copa del Mundo de Italia y la Copa del Mundo del Pro Ski Tour en Estados Unidos, aún sin fechas.
“Tengo una pequeña ayuda de patrocinadores europeos, pero no es suficiente para trabajar profesionalmente como otros. Quiero ganar una medalla para Bolivia en el futuro y hay que trabajar como los mejores. El esquí es muy complejo y costoso. Por lo tanto, espero la ayuda de Bolivia porque trabajo muy duro y con toda mi energía para obtener”.
Cuando está en Bolivia, el esquiador radica en El Alto.
(28/05/2020)