Talento, una disciplina de hierro y el deseo de complacer a su dirigente Kim Jong Un: esta es la receta según los expertos que ha llevado a la gloria a las jóvenes futbolistas norcoreanas, que han ganado dos Mundiales en menos de dos meses.
Corea del Norte, uno de los países más cerrados del mundo, suele dar más de qué hablar sobre sus ensayos balísticos y amenazas de guerra nuclear que sobre sus éxitos deportivos.
Sin embargo la selección femenina Sub-17 ha recibido numerosos elogios desde que el domingo se proclamó campeona del mundo en Santo Domingo contra España.
La federación norcoreana de fútbol «se esfuerza en poner en marcha una red coherente y dinámica de futuras estrellas», celebró Salman bin Ibrahim Al Khalifa, presidente de la Confederación Asiática de Fútbol (AFC por sus siglas en inglés).
El 22 de septiembre, las norcoreanas ya habían ganado en Colombia el Mundial Sub-20.
«En primer lugar quiero compartir esta feliz noticia con nuestro querido padre y dirigente Kim Jong Un», declaró la guardameta Sub-17 Park Ju Gyong después de la final, como debe hacer todo deportista norcoreano tras una victoria.
Habilidad y resistencia
Las futbolistas norcoreanas son «muy hábiles y tienen reputación por su resistencia», afirma Lee Sang-yoon, exfutbolista surcoreano. Formateadas por el «sistema político» de su país, «se adhieren de manera estricta a los esquemas de juego predeterminados en términos de formación y táctica», explica.
Para la joven española Irune Dorado, derrotada en la final Sub-17 en los penales, las norcoreanas forma «un equipo muy intenso».
«No te dejan respirar», contó a los medios de la FIFA.
En todos los deportes, las mujeres norcoreanas demuestran resultados muy superiores al de los hombres. Diez de las once medallas cosechadas por el país en los Juegos Asiáticos de Hangzhou (China) en 2023 fueron logradas por mujeres.
«Incluso si la sociedad norcoreana es extremadamente patriarcal en muchos aspectos, el Estado hace todo lo posible para elevar a sus deportistas femeninas al mismo nivel que sus homólogos masculinos, incluso más», declara a la AFP Shreyas Reddy, analista de la web NK News. En su opinión, Corea del Norte «aumenta también sus oportunidades de éxito» y de visibilidad.
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La selección masculina absoluta se clasificó en dos ocasiones al Mundial de fútbol, y alcanzaron los cuartos de final en Inglaterra durante la edición 1966. Actualmente ocupa el puesto 111º de la FIFA.
Por su parte la selección femenina ha participado en cuatro Mundiales y alcanzó la final en 2007. En la actualidad ocupa la 9ª posición.
¿Por qué las mujeres?
Según los expertos, Corea del Norte supo aprovechar su oportunidad en el fútbol femenino, en un momento en el que otros países se interesaban todavía poco.
Su doblete en el Mundial Sub-17 y Sub-20 de este año no es un fenómeno aislado, habiendo ganado tres ediciones del torneo en cada categoría, un récord.
Shaun Goater, exatacante de la Premier League y actual miembro del grupo de estudio técnico de la FIFA durante el torneo Sub-17, asistió a todos los partidos de Corea del Norte.
«Es un equipo muy organizado, en buena forma, atlético y con un alto nivel de capacidad técnica y de comprensión del juego», opinó.
Entre las Sub-17, la extremo Jon Il Chong ganó el premio a mejor jugadora de la competición. Su compatriota Choe Il Son, otra de las promesas, fue la máxima goleadora y mejor jugadora del Mundial Sub-20.
Una tránsfuga norcoreana, Cho Mi-young, cuenta que el Estado selecciona a las mejores futbolistas sobre césped en las escuelas primarias del país y las traslada a la capital para formarlas.
«Como es una de las raras ocasiones de Corea del Norte para atraer la atención de la comunidad internacional, el país dedica importantes recursos a la formación de deportistas talentosas», declaró Cho a Radio Free Asia.
Además del intenso entrenamiento, «la fuerza del carácter y la tenacidad de las mujeres norcoreanas puede ser el principal factor de sus victorias», opina. «El hecho de que deseen sinceramente complacer a su dirigente es otra gran motivación».
Para Heo Jeong-pil, profesor de la Universidad Dongguk de Seúl, el éxito de las jóvenes jugadoras norcoreanas se explica por «su potente condición física unida a una sólida determinación».
«Su intenso deseo por agrandar el prestigio nacional es mucho más fuerte al de otros países», añade.
(06/12/2024)