Un millón de moscas y un arco iris
Imagen: Archivo La Razón
Ricardo Bajo
Imagen: Archivo La Razón
OPINIÓN
Las moscas se meten por la nariz y la boca en la cancha municipal de Ayia Napa, a 60 kilómetros de Lárnaca, la tercera ciudad de Chipre. Los chicos de la “banda roja” han viajado durante dos días (vía Madrid y Munich) para llegar a la tercera isla más grande del mar Mediterráneo, una isla dolorosamente dividida en dos mitades por culpa de una guerra que mató a seis mil personas en 1974.
El primer rival de la gira europea del CAR (la segunda en su historia tras aquella legendaria “jira” de 1961) es un equipo de la tercera división de Israel, el F.C. Maccabi Sha’araim de la ciudad de Rehovot.
Los juveniles albirrojos, once con las sustituciones por debajo de los 17 años, son impresionados de inicio por el físico de los israelitas. Pero cuando Matías Galindo (el hijo de Gonzalo) toca junto al boliviano/brasileño Robson Matheus Tomé, otro gallo comienza a cantar. Entonces, la dupla del Caribe Dorny Romero/Jayro Jean se busca y se encuentra para que el dominicano anote el primer gol del “tour”. Dorny y Jayro son siameses separados a la hora de nacer; se parecen, son compadres y si uno se duerme en los aeropuertos, el otro también. El empate de los israelitas no hace justicia en el “score”.
Por la tarde del mismo jueves, llega el segundo amistoso. Viajamos durante dos horas en bus hasta Pafos. El rival es de temer: FC Riga, subcampeón de Letonia. Tiene tres brasileños de calidad (Joao Pedro, Douglas Aurelio y Lucas Rangel) y un argentino (Marcelo Torres). Una tormenta inunda la cancha del gualdinegro AEK Kouklia, lo que retrasa el “match”. El arco iris anuncia el puntapié inicial. Una whipala viajera dice presente en la grada. Debe ser la primera que asoma por Chipre.
Dos goles del talentoso Joao Pedro, uno de Douglas y otro del holandés Navarone Foor colocan un contundente cuatro a cero al descanso. Solo Diego Medina y Moisés “Viru” Paniagua han podido inquietar la valla del letón Ilja Isajeus.
La segunda parte, con barro y sudor, es para el equipo de Villa Ingenio. Juega de nuevo la dupla caribeña y un golazo de Jayro Jean provoca el interés de un dirigente del FC Riga. Su compadre Dorny falla un penal. Antes en el descanso, un agente del Akritas Chlorakas CF ha preguntado por Medina y Paniagua. El marcador final va a decir cinco para los letones y dos para los alteños.
En la grada se escucha hablar ruso. El presidente del FC Riga -el millonario moscovita Sergey Lomakin cuya fortuna llega a los tres mil millones de dólares- está en una lista de “persona non grata”. Ahora su club está otra: es la primera vez que un club letón le gana a orillas del mar picado a un boliviano. Quizás por eso salió un hermoso arco iris en la única isla del mundo separada por un muro.
(25/11/2022)