No hay valiente que no tiemble
Imagen: Archivo La Razón
Ricardo Bajo
Imagen: Archivo La Razón
En diciembre no hay valiente que no tiemble. La etapa francesa de la gira nos lleva a Bretaña. Desde el aeropuerto “Charles de Gaulle” parte el bus hacia Guingamp (en lengua bretón, Gwengamp), una pequeña ciudad con equipo -En Avant- en segunda división.
Por la trancadera para atravesar todo París llegamos tarde al partido. Han sido seis horas y media de flota.
Son las cinco de la tarde y es noche cerrada. El profesor francés Thomas Allain y el hincha boliviano Pablo Huisa reciben al equipo alteño con bandera tricolor y wiphalas.
El termómetro marca dos grados bajo cero. Los jugadores cruceños y la dupla caribeña del club Always Ready sufren. El equipo no ha podido descansar y alimentarse correctamente.
Sin casi hacer etapa de calentamiento y ante un centenar de hinchas fieles (a esa hora juega Brasil contra Croacia), la “banda roja” lastima al equipo bretón de inicio.
Dorny Romero incluso se atreve a estrellar una pelota en la madera. Con el transcurrir del “match” y ante el cansancio, En Avant se impone por cuatro a cero. Thomas Allain presenta a los dirigentes del CAR su flamante libro sobre la primera gira europea, la mítica del 61. Se llama “Au-delà des Andes: Le fabuleux périple européen du Club Always Ready”, a quince euritos.
En el hotel donde cenamos, la delegación sufre/goza con el Argentina vs Países Bajos. Corren apuestas. Volvemos al bus que nos regresa, siete horas después, a París.
La delegación “millonaria” se hace fotos en una apagada Torre Eiffel y en un encendido Arco de Triunfo. Es la cinco y media de la madrugada y la ciudad que no duerme tirita de frío. En los Campos Elíseos no hay ni dios.
De regreso a Milán, al día siguiente partimos a Pula, Croacia. Suena regetón y cumbia de antaño en el bus. La música es cosa de Lucas (Galarza). Diego Medina ve la serie coreana “El buen doctor” en su “tablet”.
Atravesamos Eslovenia bajo un diluvio. El rival se llama NK Istra, propiedad del empresario vasco Josean Kerejeta, máximo accionista también del Deportivo Alavés. Es un club, el croata, que quiere fichar barato y vender caro.
El partido -disputado en el estadio “Aldo Drosina”- termina tres a uno con tanto para la visita del central paraguayo David Robles. El ex Guabirá, otrora número diez, gusta de hacer goles y ya lleva dos en esta gira.
Con el central vasco del NK Istra, el compañero Einar Galilea recorremos el centro de una Pula que palpita el Mundial y admiramos su lindo anfiteatro romano. “Esta ciudad tiene tradición partisana, es de las pocas donde todavía se ven estatuas del presidente Tito”.
Han sido dos derrotas en el crudo invierno, no hay valiente que no tiemble. “Es una experiencia completa para todos, hay que endurecerse”, me dice Steven Díaz, el “vice” del CAR. Próxima y última estación: Valencia.
(15/12/2022)