Vanegas, la aliada de Caicedo por la banda izquierda de Colombia
Las colombianas han evolucionado a pasos rápidos en los últimos años, al punto de darle pelea a Brasil
Durante un tiempo, su lugar en el fútbol estuvo debajo de los tres palos. Para alegría de Colombia, Manuela Vanegas salió del área chica para instalarse en la banda izquierda, donde ha formado una fructífera alianza con Linda Caicedo en los Juegos Olímpicos de París.
La lateral de la Real Sociedad, de 23 años, es una de las piezas bisagra de la nueva y antigua generación de futbolistas cafeteras que sueñan con el inédito podio en las justas parisinas.
El subibaja por su banda fue vital para derrotar 2-0 a Nueva Zelanda el domingo en Lyon, un triunfo que revitalizó a las tricolores luego de tropezar en el debut con Francia (3-2).
Logró un gran engranaje con su compañera de equipo y amiga, Linda Caicedo, la estrella colombiana del Real Madrid, en un choque con poco margen de error.
«Manuela y yo tenemos un vínculo que va más allá del deporte, una amistad, y nos complementamos», dijo Caicedo, de 19 años, al portal de la FIFA.
«‘Manu’ es realmente una gran defensa. Me siento segura cuando ataco, porque sé que ella estará detrás. Formamos un dúo complementario: si ella ataca, yo la apoyo y viceversa», agregó.
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Misión: anotar
Como resultado de esa sinergia surgió el 2-0 que liquidó a las neozelandesas y que brindó a Colombia su primer triunfo en unos Juegos Olímpicos: Vanegas desbordó por su zona y, antes de llegar a la línea final, centró con rumbo al punto blanco.
La artillera histórica Catalina Usme abrió las piernas para que el balón pasara a Leicy Santos, quien impactó de zurda a la escuadra.
El golazo fue además una devolución de atenciones, pues en la fase de grupos del Mundial de 2023, Santos cobró un córner que Vanegas transformó con la cabeza en la victoria histórica 2-1 contra Alemania.
«A veces tengo que correr porque Linda es muy rápida e intentamos atacar en esa zona para crear peligro. Estoy segura de que anotaré en el próximo partido», dijo Vanegas al final del cotejo con las oceánicas.
Aunque ninguna de las dos ha marcado aún, su fortaleza por la banda izquierda fue destacada incluso por el técnico de las oceánicas, Michael Mayne, y puede ser vital para sellar la clasificación a cuartos de final el miércoles.
Ese día en Niza, en el cierre de la fase de grupos, chocarán con las campeonas defensoras, Canadá, también necesitadas de un triunfo debido a la quita de 6 puntos impuesta por un escándalo de espionaje.
Cambio de mentalidad
La consecución del pase al selecto grupo de las ocho mejores, en el que ya están instaladas la todopoderosa España y Estados Unidos, sería inédito para las cafeteras, eliminadas en la primera ronda en sus dos únicas participaciones olímpicas: Londres-2012 y Rio de Janeiro-2016.
Dirigidas por Ángelo Marsiglia, las colombianas han evolucionado a pasos rápidos en los últimos años, al punto de darle pelea a Brasil, la gran selección sudamericana del balompié femenino.
«Ya no tenemos la mentalidad de ir a un gran torneo a participar, sino que venimos a Francia a conseguir el mejor resultado posible», dijo Vanegas al diario español Marca.
Lejos quedaron las atajadas con las que se inició en el mundo de la pelota, en las calles del municipio de Copacabana, en el departamento de Antioquia (noroeste). Por su cabeza, afirma, solo pasan imágenes doradas.
«¡Claro que me he soñado ya con la medalla de oro y en lo alto de ese podio escuchando el himno de mi país!», afirmó. «Hay que visualizarlo y soñarlo para que se pueda hacer realidad».
(30/07/2024)
