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Pregúntale a tu amigo gay

Hola Salvador,

Voy por los 23 años, conocí a una preciosa mujer en otro país, estuve siete días con esa persona en el país cara a cara y ahora aún mantenemos el contacto. Ambos expresamos lo que sentimos de una u otra manera y, al final, tanto ella y yo nos agradamos mutuamente. Pero, lo difícil es mantener esa relación, ¿Me puedes dar algún consejo para que en lo posterior nosotros tengamos la oportunidad de ser pareja? El viajero

Querido viajero: ¡Ay! Qué románticos son esos amores de verano, ¿no? Me alegra mucho de que estés viviendo esa experiencia, sobre todo porque lo mejor de la vida se resume en momentos como ése, recuerdos dulces y perfectos para atesorar por siempre.

Sin embargo, entenderás que una semana no es suficiente para tomar en serio una relación, ¿verdad? Así es que te recomiendo que el primer paso en tu nueva relación sea decidir conocerse uno al otro, para ver si realmente se llevan bien y si tienen maneras similares de pensar.

En base a esto, en un par de meses, tendrás más certeza, o no, de si en realidad fue solamente un amor de verano o si es que en esas vacaciones conociste a la mujer de tu vida. A veces, el amor no toca la puerta, sino te manda una postal.

Desde luego, al lado tuyo o en otro país, ninguna relación puede sobrevivir si no mantienes la llama del amor encendida. Para eso, el siglo XXI tiene un sinfín de recursos desde los más clásicos —como las redes sociales, los chats interactivos y las videoconferencias— hasta algunos más novedosos y frescos — como las tarjetas on-line, las presentaciones power-point personalizadas (con música y fotos que puedes sacar para ella) y regalos virtuales—. Pueden, por ejemplo, montar una cena romántica vía Skype o, puedes grabarle una canción y subirla a YouTube. En pocas palabras, investiga un poco la web y déjate llevar por la creatividad para que tu relación a distancia ni se enfríe ni caiga en la monotonía del chat o los correos electrónicos.

Las semanas pasarán y las ideas se irán cerrando. Si en unos meses, aún siguen enamorados, corresponderá hablar de planes de viaje para volver a verse y luego, de la posibilidad de mudarse a la ciudad del otro. De todos modos, nunca levantes los pies del suelo y sé consciente de lo que implica una relación a distancia: nunca sabes lo que hace la otra persona a ciencia cierta.

Mi querido amigo, el amor no tiene límites ni conoce de fronteras. El amor todo lo puede, todo lo logra y todo lo conquista. El amor no se rinde, no se cansa y no se detiene. Sigue a tu corazón y si tu amada está al otro lado del charco, pues vende tu iphone y cómprate un bote.

‘Investiga un poco en la web y déjate llevar por la creatividad para que tu relación a distancia ni se enfríe ni caiga en la monotonía del chat o los correos electrónicos’

Tu amigo

Salvador G