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Pregúntale a tu amigo gay

Tengo 18 años y hace unas semanas decidí escapar de casa porque mi madre se enteró  de que soy gay y me dijo que prefería verme muerto antes que tener un hijo gay. Toda mi familia es cristiana y sé que cuando se enteren ellos me mirarán con otros ojos, me juzgarán cuando hablen entre ellos y me hablarán de cómo Dios repudia a los homosexuales. Yo tengo mi pareja y lo amo, no es sólo algo sexual. No entiendo por qué es malo amar a alguien, pero sé lo que dice la biblia. He pensado en quedarme soltero y dedicar toda mi vida a Dios, pero no sé si sería feliz así. No sé qué hacer, lloro mucho y hasta he pensado en quitarme la vida para acabar con mi tormento. Para colmo se me están acabando los ahorros y no sé cómo hacer para seguir subsistiendo. Israel

Amigo mío: Tu historia me parte el corazón porque varios amigos míos pasaron por situaciones similares a la tuya. Hay mucho que decir sobre este tema, pero intentaré resumirlo en estas líneas.

Eres cristiano, ¿verdad? Pues Dios es amor. Todo lo que es amor viene de Dios y Dios nunca verá mal la expresión honesta y sincera del amor entre dos personas, no sólo porque es el más noble de los sentimientos, sino también porque es un mandamiento, el único mandamiento del nuevo testamento.

Es decir, es la única norma o ley que dejó Dios en el nuevo pacto.

Desde luego, hay algunas partes en la Biblia que podrían malinterpretarse en contra de la homosexualidad; sin embargo, la misma Palabra menciona en varias partes que, más importantes que las leyes, las profecías, las ciencias, inclusive que la fe y la esperanza es el amor. Te invito a leer la Primera Carta a los Corintios, Capítulo 13.

En conclusión, no tienes por qué dejar de ser quien eres. Ama en libertad y ten la certeza de que Dios bendice tu relación, porque es un Padre de amor y Él quiere tu felicidad.

También quiero que entiendas que si bien tu madre está actuando equivocadamente, ella lo hace por amor, porque en su conocimiento ser gay es malo, por tanto, como te ama, sólo quiere lo bueno para ti. Debes darle un tiempo para que digiera la idea y verás que poco a poco las cosas irán mejorando, como en casi todos los casos como el tuyo. Ponte a pensar en cuántos años te tomó a ti entenderte y afirmarte como gay. ¿Cinco? ¿Ocho? Pues dale también un tiempo a tu familia y permite que poco a poco vaya aprendiendo de ti, cómo los gays no somos ni más ni menos que el resto. Sobre todo predica con el ejemplo y sé siempre un buen chico.

Mi querido Israel, es importante que regreses a tu casa. Imagino que tu familia debe estar muy preocupada por ti y escapar no es la mejor forma de enfrentar las dificultades. Quizás te esperen días difíciles, pero si crees en Dios, comprenderás que Él nunca va a ponerte retos que sean mayores a los que puedas superar.

¡Fuerza! ¡Paciencia! ¡Firmeza!

“Dale un tiempo a tu familia y permite que poco a poco aprendan de ti que los gays no somos ni más ni menos”.

Tu amigo

Salvador G