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Lindsay Lohan ¿Una vida reformada?

Acaba de cumplir 26 años y en tan corto tiempo Lindsay Lohan, Lilo, ha protagonizado polémicas que la incluyen con manchas de polvo blanco en la ropa,  cayéndose de bruces contra un cactus, bailando fuera de sí en el festival de Coachella o inconsciente en el asiento trasero de un coche. Una lista de supuestos amantes incluyó a Bruce Willis, Benicio del Toro, Jude Law o Colin Farrell. Finalmente, clínicas de rehabilitación, el robo de un collar y el accidente de coche que desató sus problemas por conducir en estado de ebriedad en 2008 parecen dar paso ¡al fin! al renacer de la artista. 

La actriz y cantante concretó hace unos días un acuerdo extrajudicial con las tres personas que la demandaron en 2008 por haber puesto en riesgo sus vidas cuando Lilo conducía a máxima velocidad. La buena nueva llega con la filmación para Tv del filme Liz and Dick, donde la exestrella infantil encarnará a Elizabeth Taylor.

Lohan comenzó su carrera como una niña pelirroja, adorable y llena de pecas. A sus tres años apareció en comerciales de Wendy’s, Pizza Hut, Padres Felices y Jell-O. Así se convirtió en una de las promesas más rentables de la factoría Disney. Pero la imagen de niña tierna fue rebasada por una Lindsay fuera de control, un festín para los paparazzis que la perseguían ebria al salir de los clubes. “En cuanto me divierto un poco, la gente empieza a pensar que estoy loca”, decía la actriz. Quizás por ello en 2010 Lohan se vio condenada a llevar un brazalete en el pie que detectaba en su sudor rastros de droga y alcohol. Igual violó su libertad condicional, por lo que fue condenada a la cárcel por seis días, hizo servicio comunitario en la morgue del centro de Los Ángeles y recibió terapia psicológica, todo en menos de cuatro años; fue la chica mala de Hollywood.

Sus inicios como chica Disney no llegaron a buen puerto, pues al cumplir 18 la joven ya se reveló, se mudó y hasta sostuvo una relación con la DJ Samantha Ronson, quien se dice que engañó a la actriz. Disney repudió a su preferida y Lohan tuvo que dedicarse al cine independiente.

Lejos quedaba la niña que le prometía a la prensa que ganaría un Oscar antes de cumplir 30. Lo que sí hizo, pese a que negó que lo haría, fue posar para la revista Playboy. Hoy se mantiene tranquila, aunque ya se desmayó, producto de las extenuantes jornadas de grabación de Liz and Dick, cuyos productores ya le pidieron que no maneje, por si las moscas.

Filmes

‘Juego de gemelas’ (1997), ‘Freaky Friday’ (2003), ‘Confesiones de una adolescente’ (2003), ‘Chicas pesadas’ (2004) ‘Herbie’ (2006), ‘Labor pains’ (2009), ‘Machete’ (2010).

Información: El País, radioformula.com.mx, peopleenespanol.com