Si aún no sabes si pasarás la Nochebuena con los padres de tu pareja o con los tuyos, debes conversarlo, no olvides que la base de cada acuerdo es el consenso y lo importante es que todos se sientan conformes y no frustrados en esa fecha especial.
Por lo general, las familias con hijos pasan Navidad juntos y en casa, pero cuando los abuelos paternos o maternos están solos, suelen presentarse conflictos. ¿Los invitas? ¿Vas a su casa? ¿Pasas por ellos y se van todos juntos donde los otros abuelos?
“Puedes consensuar para pasar Nochebuena con tus padres y el siguiente día, con los de él, aunque lograr unir a ambas familias en un mismo lugar sería lo ideal”, aconseja la psicóloga Patricia Tellería. La especialista recomienda abrirse y ver posibilidades y circunstancias que beneficien y hagan felices a todos.
“En caso de que existan diferencias de caracteres —no te lleves bien con tu suegra o con los cuñados— entonces deberás hacer un esfuerzo ese día y pensar que es una noche en la que los gestos de amor y bondad deben reinar para dar paz y felicidad a la celebración”, sugiere por su parte la psicóloga Susana Saenz.
Si, por ejemplo, uno de los abuelos está enfermo, la solidaridad y el cariño es el que pesa, así que prepara los paquetes necesarios para trasladarte con los tuyos a su casa.
Si te toca pasar esta Navidad con tus padres y ellos viven en otra ciudad o país, analiza tu economía, tus posibilidades y tu tiempo.
No siempre disfrutamos de toda compañía, lo importante es que seas tolerante. Las fiestas navideñas implican muchas veces encontrarnos con familiares que no son del todo de nuestro agrado. Recuerda que es sólo una noche, evita las malas actitudes.
Si tu pareja no simpatiza con estas fiestas, no la hostigues para que participe, menos si se muestra reacia a socializar con tus parientes. En estos casos hay que negociar, haciendo hincapié de lo importante que es para ti esta tradición, eso sí, evitando exponerla a situaciones incómodas.ç+Evita consecuencias
Toma la decisión que sea en consenso y con el tiempo suficiente para no obstaculizar planes. Piensa bien y evita actuar por impulso, porque alguien de la familia puede quedar lastimado. A futuro, este tipo de situaciones podría traer consecuencias en la pareja.
La misma casa
Si compartes el mismo edificio con tus padres o suegros, sigue tus costumbres y tradiciones a tu manera hasta la medianoche, para luego reunirte con ellos en cualquiera de los dos departamentos, compartir la picana y terminar cada quien en sus casas.
Fuentes: Patricia Tellería y Susana Saenz, psicólogas