Muchas mujeres han optado por trabajar en casa con el objetivo de no descuidar a sus hijos, y aunque parece que esa forma facilita desarrollar los roles, requiere de unas claves para que la misión sea exitosa. Aquí van:

➣ No trates de adaptar al bebé a tu horario y ritmo, es mejor que establezcas un horario sobre la base de los suyos. Y si algo tienen los pequeños es que son un reloj suizo para pedir comida o para que le cambien el pañal. Así que usa eso a tu favor.

➣ Fíjate en qué tiempo rindes mejor y si requieres un horario estricto o flexible. Algunas personas son más productivas si reservan un periodo fijo cada día para trabajar, y saben que no tendrán ninguna perturbación de los niños. Otras, en cambio, prefieren uno flexible que les permita interrumpir el trabajo una hora si el bebé necesita que le den el pecho, por ejemplo.

➣ Programa tu tiempo de ‘transición’ al comienzo de tu horario de trabajo. No es fácil pasar de cambiar un pañal a escribir un informe. Usa los primeros minutos para escribir una lista de las cosas que necesitas hacer ese día y luego continúa con tu documento. No dediques cada minuto libre a trabajar. Es importante que tengas un rato cada día para relajarte y descansar.

Niños en edad preescolar

Esa edad es algo más complicada porque los niños requieren mayor atención, así que llévalos a la guardería unas horas en la mañana y usa ese tiempo para trabajar.

Si no tienes esa opción, organiza actividades para que se entretengan cerca de ti, así puedes mantener el control y hacer algunas cosas. Toma en cuenta ponerles a la mano alguna merienda y agua, y llévalos al baño. Deja lo que necesiten para la actividad de manera que no te interrumpan cada cinco segundos.

Levántate temprano para adelantar trabajo. También aprovecha la siesta de tus niños y cuando duermen en la noche. Esto funciona en ciertos momentos a no ser que ellos y tú tengan una rutina.

Niños en edad escolar

Aquí es sencillo porque simplemente te organizas en función a los horarios de clases.

Las reglas de oro

➤ Sé flexible en tu planificación y procura anticipar trabajo siempre que puedas.

➤ Aunque te parecerá tonto, así no vayas a salir debes cambiarte el pijama, psicológicamente tu mente comprenderá que vas a trabajar si te cambias de ropa.

➤ Planea tus comidas semanales de antemano, cocina doble y congela la mitad para otro día.

➤ Evita las interrupciones que no sean por emergencias.

➤ Diles a tus amigos cuál es tu horario de trabajo para que no te llamen a esas horas.

➤ Si recibes una llamada personal en tu horario de trabajo, ofrécete a volver a llamar cuando acabes tu trabajo.

➤ Si no puedes poner una línea de teléfono independiente para tu negocio, usa el teléfono móvil para tu trabajo y, durante tu horario laboral, permite que la máquina contestadora recoja las llamadas al teléfono de la casa.