Amor VS. Deseo
Distinguir el amor de la pasión, más al inicio de una relación, no es fácil, pero hay señales claras. El enamoramiento, que llega con mariposas en la panza, tiene que ver con la secreción de hormonas, algo así como pasa durante el acto sexual y dista de la construcción de pareja y de cultivar el amor.
Muchas veces se ha oído acerca del famoso ‘flechazo de Cupido’ o ‘el amor a primera vista’. Más aún, se debate entre si existe ese sentimiento y es duradero en el tiempo o es un efímero deseo.
Distinguir el amor de la pasión, más al inicio de una relación, no es fácil, pero hay señales claras. El enamoramiento, que llega con mariposas en la panza, tiene que ver con la secreción de hormonas, algo así como pasa durante el acto sexual y dista de la construcción de pareja y de cultivar el amor.
Otra diferencia que señala la terapeuta de parejas Elizabeth Ordóñez es que uno se enamora del otro porque se autoidentifica. “Encuentra en el otro los mismos gustos y otras características”, dice.
En cambio, en el amor, uno debe aprender a amar las virtudes del otro y lidiar con los defectos. Por su parte, la sexóloga Anahí Navarro advierte que en la sociedad moderna hay una confusión entre el deseo y el amor por la construcción de símbolos e imágenes de los medios de comunicación. “El romanticismo, que se maneja en novelas y películas, confunde en algún punto entre el amor y esa relación química”.
Ambas especialistas concuerdan en que el deseo se da en una fase inicial, cuando se conoce a una persona que provoca atracción física. “Para ser más realista, es un deseo sexual”, comenta Navarro. A ello, Ordóñez añade que ese periodo no es duradero, es decir que el deseo puede perderse al formalizar la relación o porque se cumplió con el propósito instintivosexual.
El amor no se lo puede definir, ya que en cada persona lo expresa de diferente forma, pero existen rasgos comunes que tienen que ver con la madurez de los enamorados y de la misma la relación. “Cuando se habla de deseo hay una necesidad del uno por el otro. Mientras que cuando hay amor no existe esa necesidad, sino más bien el querer planear un futuro juntos”, describe la sexóloga.
Cuando se pasa el deseo, llega el enamoramiento, que no es lo mismo que amor; en esta etapa se observan no solo los encantos físicos que provocan la atracción sexual, sino los defectos y las virtudes. Con ello se llega a otra etapa, donde se aceptan el uno al otro y ambos velan por el bienestar.
Cuando es amor
Definición: No hay una definición, pero los psicólogos lo conceptualizan como ‘un sentimiento profundo, un afecto desmedido hacia una persona’ que impulsa a dar lo mejor de uno mismo para la felicidad del otro.
Tiempo: El amor es un proceso que se construye entre dos y es día a día, aprendiendo de los errores de ti y de tu compañero/a. Es progresivo.
Expectativas: Se puede esperar sentir seguridad, paz y compañerismo. En los mejores casos, puede existir un ambiente idóneo que permite a la pareja pensar establecerse y llevar la relación al siguiente nivel. Incluso, en algunos casos, se planifica una vida en familia.
Cuando es deseo
Definición: Intensas ganas de obtener una gratificación. Cuando se le compara con el amor, el deseo se vuelve sexual.
Tiempo: El deseo ocurre de manera instantánea, en un segundo puedes darte cuenta de que esa persona te gusta y es especial para ti.
Expectativas: Cuando no se satisfacen esos deseos, se puede sentir frustración. Después de un tiempo pueden haber creencias erráticas y rigidez emocional. Cuando se le satisface y es benéfica para ambas partes, existe placer, creatividad, pasión y entusiasmo.
Fuentes: Elizabeth Ordóñez (Terapeuta de parejas) y Anahí Navarro (Psicóloga especialista en sexología)