Alternativas naturales al talco de bebé
Esta noticia, que ha revolucionado el ritual de aseo de millones de mujeres en el mundo, lleva a buscar alternativas para mantener secas las zonas del cuerpo propensas a la humedad, como las ingles, las axilas, los pies y otros recovecos.
La marca de talco de bebé, más famosa del mundo, Johnson & Johnson, ha tenido que pagar en 2017, en Estados Unidos, más de $us 4.000 millones a 22 personas que aseguraron que este producto les causó cáncer de ovario.
Y aún hay otros 22.000 exusuarios que la están demandando por no advertir que los polvos de talco contenían asbesto, un mineral cancerígeno, lo cual la compañía viene negando.
Esta noticia, que ha revolucionado el ritual de aseo de millones de mujeres en el mundo, lleva a buscar alternativas para mantener secas las zonas del cuerpo propensas a la humedad, como las ingles, las axilas, los pies y otros recovecos.
“Para problemas de transpiración tenemos que recurrir a las harinas nomás”, sugiere la médica homeópata y bionaturista Rocío Alarcón. Las más sanas son las de avena y arroz, afirma, y no tanto la de maíz (conocida como maicena), pues la mayoría se elabora con maíz transgénico.
Otra opción es el bicarbonato de sodio, un derivado de la sal que podría ser muy fuerte para la piel de los bebés, por lo cual Alarcón recomienda hacer una mezcla de 3/4 de harina (de avena o de arroz) y 1/4 de bicarbonato. Asimismo, plantea el uso de la arcilla blanca, “siempre cuando esté bien molida, más conocida como ph’asa en el campo, donde también se ingiere. Sobre la piel puede calmar escaldaduras e irritaciones”, afirma.
Una piel suave y seca, con sensación de frescura, también es posible con productos naturales. Anímate a probarlos, por un 2019 más saludable.
Tres productos contra el exceso de humedad
• Bicarbonato de sodio. Desde la caspa, hasta los granos, el bicarbonato de sodio tiene un sinfín de usos en forma de pasta. Para combatir la humedad, la médica homeópata y naturista Rocío Alarcón recomienda hacer una mezcla de 3/4 de harina (de trigo o arroz) y 1/4 de bicarbonato, pues si se aplica de forma directa puede alterar el PH de las pieles más sensibles.
• Harina de avena. Hidratación y nutrición de la piel son dos de los mayores beneficios de la avena sobre la piel, por eso no es raro encontrarla como ingrediente en productos de belleza como cremas y shampús. Otra ventaja es que calma los enrojecimientos. También se puede optar por la harina de arroz o la de trigo (cuidando que no sean transgénicas).
• Arcilla blanca. Lo importante es que esté bien molida. También llamada ph’asa en el área rural, tiene propiedades curativas sobre la piel y también al ingerirla. Hidrata, mantiene la suavidad y calma las irritaciones. Se usa para aliviar picores, quemaduras y descamaciones. Se dice que mezclada con aceite de argán ayuda a mejorar la apariencia de las estrías.
Con datos de: Rocío Alarcón (tel: 69848550) y The New York Times