La pelea, fuera de la cancha
Uno de los cambios positivos es que por primera vez las marcas Nike y Adidas visten a las futbolistas con uniformes acordes a los cuerpos femeninos. Antes, ellas debían adptarse a los modelos masculinos.
El partido contra el machismo en el fútbol se juega fuera de la cancha. Mañana comenzará la Copa Mundial Femenina de Fútbol en Francia, una cita que reúne a 24 equipos a lo largo de un mes. Y aunque se trata de la octava versión, marca sin duda un giro respecto a los anteriores, el de la lucha por la equidad de género.
La estrella de la selección estadounidense de fútbol, Megan Rapinoe, criticó duramente a la FIFA al tildar de “ridículo” que la final del Mundial femenino se vaya a disputar el 7 de julio, al mismo tiempo que las últimas instancias de la Copa América y la Copa Oro.
De hecho, las jugadoras de ese país —tres veces campeón mundial— han sido las más activas en los últimos meses, al evidenciar la brecha salarial con los hombres y exigir —a través de un recurso legal— al ente futbolístico rector de ese país que las profesionales de este deporte ganen lo mismo. No sorprende, dado que allá es donde se han originado movimientos globales como el #MeToo.
Por otra parte, la ausencia de la primera mujer ganadora en 2018 del Balón de Oro, Ada Hegerberg, quien no participará junto a su selección, Noruega, en esta cita mundial, en protesta por la poca atención que se le da a la rama femenina en su país, demuestra que la cosa va en serio.
Uno de los cambios positivos es que por primera vez las marcas Nike y Adidas visten a las futbolistas con uniformes acordes a los cuerpos femeninos. Antes, ellas debían adptarse a los modelos masculinos.
“Aquí en Bolivia, también siempre nos han dado uniformes de hombres, muy grandes y eso es incómodo… Este Mundial va a cambiar muchas cosas, yo creo que es el comienzo del cambio del fútbol femenino a nivel mundial, ya las entradas se han vendido, yo creo que los estadios van a estar completamente llenos”, considera Zdenka Bacarreza, primera asistente de las tres selecciones femeninas de Bolivia.
Sin embargo, la brecha económica entre géneros persiste. “La selección campeona del Mundial de Francia 2019 se llevará un premio de $us 4 millones, lo que supone doblar los $us 2 millones ganados en 2015 por EEUU, cifra muy alejada de los $us 38 millones que la FIFA pagó a Francia por ganar el Mundial de Rusia 2018”, señala Infobae.
El dinero que la FIFA destina a premios que se repartirán entre los 24 equipos participantes en el Mundial también se ha doblado, pasando de los $us 15 millones de 2015 a los $us 30 millones de esta edición; aunque es un monto irrisorio en comparación con los $us 400 millones que se repartieron entre las 32 selecciones que participaron en el Mundial masculino en Rusia 2018.
Además, esos $us 15 millones de más que recibirán las mujeres en 2019 son menos de la mitad del aumento de más de $us 40 que percibirán las escuadras masculinas en Catar-2022.
Esto, ya sin entrar a develar las batallas más internas. De la vida privada y los niños, muy pocas se atreven a hablar. Escasas son las mujeres que son madres en plena carrera deportiva, cuando muchos de los futbolistas profesionales están casados y son padres de familia.
La jugadora estadounidense Sydney Leroux Dwyer publicó en marzo fotos en Twitter del entrenamiento estando embarazada de cinco meses y medio. Esta iniciativa fue aplaudida por su compañera, la estrella Alex Morgan, aunque también criticada… “en un 99% de casos por hombres”, obligando a la jugadora del Orlando Pride a justificarse.
“No me meto en situaciones en las que el balón pueda rebotar o tocarme. No hago carreras intensas y escucho a mi GINECÓLOGO (que me conoce mejor que aquellos que me dicen lo que no debería hacer con MI cuerpo”, explicó.
Para la futbolista francesa Candice Prevost esta es la principal dificultad que encuentran todas las jugadoras del mundo: “El peso del patriarcado”.
Tanto más en un universo como el fútbol donde los hombres son mucho más reconocidos. “No se nos da mucho y decimos gracias”, lamenta.
La Balón de Oro no jugará como protesta
La noruega Ada Hegerberg (23), quien en 2018 obtuvo el primer Balón de Oro femenino de la FIFA, no jugará con la selección de su país en este Mundial, en protesta por las condiciones del fútbol femenino. Lleva dos años alejada del equipo nacional. “El fútbol es el deporte más importante de Noruega para las niñas y lo ha sido durante años, pero las chicas no tienen las mismas oportunidades que los chicos. Noruega tiene un gran pasado en el fútbol femenino, pero ahora es más difícil”, dijo a CNN.
Adidas se suma a la lucha por igualdad
La marca Adidas anunció que se dará los mismos premios que reciben los hombres a las mujeres que conquisten el Mundial de Fútbol Francia 2019 (Guante, Botín y Balón de Oro, entre los individuales). Eric Liedtke, ejecutivo y director de marcas globales, publicó mediante Twitter: “Creemos en inspirar y capacitar a la próxima generación de mujeres atletas, creadoras y líderes a través de romper barreras”, informó La Vanguardia.
¡Por fin! Poleras a la medida de ellas
Por décadas, los uniformes de las mujeres eran derivados de los de hombres. Pero para este Mundial, Nike hizo conjuntos a 14 de los 24 equipos que competirán por la Copa mundial, por primera vez diseñados para mujeres. También Adidas presentó nuevos diseños para otras cuatro selecciones. Las mujeres están más interesadas en el confort y en verse profesionales, dijo a NYTimes, un gerente de Nike.
Brasileñas jugarán con logo de ‘guerreras’
La camiseta 2 que usará la selección brasileña femenina de fútbol será azul, diferente al modelo blanco que usan Neymar y compañía en la Copa América. Se verá un interesante patrón gráfico que adorna la superficie de la camiseta, acompañado por un efecto degradé en la parte baja. Un sello al interior del escudo reza “Mujeres Guerreras de Brasil”, mientras que la tira elástica se pinta de amarillo.
Póster oficial refleja el empoderamiento
El póster oficial de la Copa Mundial Femenina de la FIFA refleja el tema del torneo: un campo de juego equitativo para el fútbol femenil y el empoderamiento a través del fútbol de las niñas y las mujeres y de la sociedad en general, informa la agencia de noticias Xinhua. La luz amarilla representa el lema oficial: El momento de brillar” y el ondear del cabello significa el empoderamiento de la mujer en el mundo.
Marta Vieira da Silva (Brasil)
La brasileña Marta (33) juega como delantera de su selección. Viene de una familia de escasos recursos. Empezó con el fútbol a los 14 años. Su familia quería que jugara con muñecas y no con la pelota, cuenta BBC. Ha ganado seis premios FIFA como Mejor Jugadora del mundo. Es embajadora de Buena Voluntad de la ONU. La fichó Orlando Pride, de la liga estadounidense de fútbol profesional femenino.
Jennifer Hermoso (España)
La centrocampista ofensiva de la selección española tiene 29 años. Empezó a jugar fútbol a los seis años, con niños, pues entonces no había escuelas de niñas. Considera que se ha avanzado en este aspecto y que las futbolistas pueden ser un referente para que las pequeñas que vienen detrás sientan que “pueden alcanzar sus sueños”, dijo a La Hora Digital. Destaca por ser la goleadora en cada partido.
Dzsenifer Marozsán (Alemania)
La mediocampista de 27 años es la capitana de su selección. Fue finalista del premio The Best 2018. Su inspiración para el fútbol fue su padre, un exjugador de la selección de fútbol de Hungría, pero la madre no estaba de acuerdo. Ella prefería jugar a escondidas para no causar problemas. A los 14 años se convirtió en la jugadora más joven de la historia de Bundesliga femenina, cuenta Marcas de La Razón.
Estefanía Banini (Argentina)
A los 28 años es centrocampista y capitana de su selección. Empezó cuando estaba en kínder. Es apodada La Messi, lo cual no le molesta. “Si queremos igualdad no nos pueden molestar las comparaciones”, dijo a Tiempo Argentino, donde cuenta que en los clubes había padres que no soportaban que “humillara” a su hijo en la cancha. Fue la única mujer en Cementista de Mendoza durante 10 años.
Christine Margaret Sinclair (Canadá)
Delantera y capitana de 35 años. Fue elegida 14 veces como la mejor jugadora de su país. Debutó en la selección nacional a los 16 años. Ha marcado 181 goles internacionales en su carrera. Fue nominada siete veces como mejor jugadora de la FIFA. Estudió Biología en la Universidad. En octubre protestó en Twitter, porque la cuenta del ente futbolero de su país posteaba solo sobre el fútbol masculino.
Saki Kumagai (Japón)
La centrocampista y capitana de la selección japonesa de 28 años milita en el Olympique de Lyon. Es la primera futbolista asiática que jugó 50 partidos en la Champions League y la tercera no europea en conseguirlo. Su pasión empezó al ver a su hermano jugar en un club local. Ella lo admiraba y quería ser como él, por lo que practicaba en la primaria. Ganó 17 premios de fútbol, según Aminoapps.
Con datos de: AFP e Infobae