El ex dictador argentino Jorge Videla volvió al banquillo de los acusados, por primera vez desde 1985, en un juicio oral por el fusilamiento de 31 presos políticos en un penal de la provincia de Córdoba en el régimen de facto, constató un periodista de la AFP.

Vestido con traje y corbata, Videla, de 84 años, es juzgado junto a otros 30 imputados, incluido el ex jerarca militar Luciano Menéndez, condenado a cadena perpetua en otros dos juicios.

La causa investiga el fusilamiento de 31 presos políticos en cárceles de Córdoba en 1976, la mayoría ejecutados durante traslados autorizados por un juez, en medio de supuestos intentos de fuga fraguados para justificar su asesinato, según la instrucción.

Al concluir el primer tramo de la acusación, Videla pidió la palabra, pero el presidente del tribunal, Jaime Díaz Gavier, dijo que no le correspondía en ese momento, mientras los familiares de las víctimas lloraban al ser leídas las imputaciones contra el ex dictador.