Icono del sitio La Razón

Japón prohíbe que los bebés tomen agua corriente en Tokio

 

Japón prohibió hoy en Tokio el consumo de agua corriente para los bebés y la comercialización de alimentos contaminados por la radiactividad de la central de Fukushima, acentuando así el temor que genera el accidente nuclear nipón en Estados Unidos y otros países, informó AFP.

El Gobierno metropolitano de Tokio admitió este miércoles que los niveles de yodo radiactivo en el agua de la capital superan los límites permitidos para niños menores de un año, según público.es.

France Press precisa que la red de agua municipal tiene niveles de yodo radiactivo dos veces superior a los límites autorizados para los bebés.

Los datos de radiación fueron recopilados en una de las plantas depuradoras de la capital, agrega el periódico español Público.

En esa planta se detectaron 210 becquerel de yodo radiactivo por litro, lo que supone más del doble del límite que se considera seguro para los bebés.

Pronto el alcalde de Tokio, Shintaro Ishihara, llamó a la «calma» y la «sensatez». También el portavoz del Gobierno, Yukio Edano, apeló a la gente a «no hacer acopio de agua embotellada» para permitir que esas provisiones lleguen a los refugiados de Iwate y Miyagi, las dos provincias devastadas por el tsunami

Pese a los pedidos de calma, el agua embotellada desapareció rápidamente en la capital nipona, pese a que el gobierno había pedido evitar las compras motivadas por el pánico, según la agencia de noticias Kyodo.

Riesgo

Doce días después del sismo y el tsunami en el noreste del país, que causaron más de 25.000 muertos y desaparecidos –de ellos, 9.487 fallecimientos confirmados– las autoridades niponas siguen sin descartar el riesgo nuclear.

Una nueva humareda negra inquietante se elevaba el miércoles por la tarde del edificio que alberga el reactor 3 de la central accidentada, lo que obligó a evacuar a parte del personal, anunció el operador de la central, Tokyo Electric Power (Tepco), según France Press.

Estos nuevos escapes, mostrados por la televisión nacional, acentuaron los temores de contaminación de la cadena alimentaria.