La condena dictada contra Silvio Berlusconi por abuso de poder y prostitución de menores en el caso Ruby puede complicar la acción del gobierno de izquierda y derecha que conduce el presidente del consejo Enrico Letta, a pesar de la ausencia de consecuencias inmediatas para el futuro político del Il Cavaliere.
Observadores consideran “señal negativa” el hecho de que Berlusconi no haya mencionado si retira o no su apoyo al gobierno de coalición tras la condena de siete años de cárcel e inhabilitación perpetua para un cargo público.
El magnate se limita a denunciar la conspiración “para eliminarlo de la política” y se proclama inocente. Sus declaraciones contrastan con las de la semana pasada, cuando reiteró su “apoyo leal” al Gobierno poco después de que la Corte rechazara un recurso para que le anularan la condena en el caso Mediaset.