Cuestionan la lentitud de juicios contra represores
Sistema judicial chileno favorecería a quienes fueron parte del régimen
A 40 años del golpe de Estado que derrocó al gobierno de Salvador Allende, Chile avanza en los juicios a quienes cometieron crímenes de lesa humanidad bajo la dictadura militar como pocos países en Latinoamérica, pero en medio de críticas.
Los tribunales tramitan hoy 1.250 procesos, por los cuales han sido juzgados 911 exagentes, de los que 263 han recibido sentencia condenatoria definitiva y el resto espera aún el resultado del juicio. Además de Argentina, Chile es el único país de la región que mantiene en prisión a los jefes de los organismos represivos bajo la dictadura de Augusto Pinochet. Pero a pesar de ello, las organizaciones de derechos humanos se muestran críticas con la actuación del Poder Judicial en estos casos.
Una de las principales críticas es la cantidad de agentes que han recibido bajas penas, que de acuerdo con la legislación procesal penal chilena pueden cumplir en libertad vigilada. En este contexto, de los 263 condenados con sentencias definitivas, sólo 66 las cumplen con cárcel efectiva, lo que pone de manifiesto que 197 agentes han sido beneficiados con penas menores, que cumplen en libertad. La lentitud de los procesos, algunos de los cuales se mantienen abiertos desde hace 15 o 20 años, también es observada.
Otras quejas están relacionadas con las cárceles especiales para militares que cometieron delitos de lesa humanidad y la aún vigente Ley de Amnistía que exculpa a quienes cometieron delitos entre 1973 y 1978.
Evitarán hoy tumultos con 8.000 policías en la capital
Unos 8.000 policías serán desplegados hoy en Santiago de Chile para resguardar la seguridad durante el 40 aniversario del golpe militar contra el gobierno del socialista Salvador Allende. “Hemos tenido en materia de seguridad una preocupación especial, desde hace ya varios días”, afirmó al respecto el ministro del Interior, Andrés Chadwick.
Carabineros “ha desplegado un plan operativo con mucha presencia, especialmente en lugares simbólicos”, añadió Chadwick, que precisó que el Gobierno espera situaciones de violencia “similares a las que ocurren en el Día del Joven Combatiente”, cada 29 de marzo. El año pasado, durante el aniversario del golpe, un policía de 27 años murió en enfrentamientos ocurridos en el barrio obrero de La Pincoya, al norte de Santiago, uno de los 350 lugares en que hubo barricadas y choques entre manifestantes y la Policía, que detuvo a 280 personas.