Inseguridad e inflación centran pugna legislativa en Argentina
Los comicios pueden determinar una tercera reelección de Cristina Fernández. Por su parte, la oposición trabaja en ofrecer a los electores alternativas a la inseguridad, principal preocupación de los argentinos.
La campaña para los comicios legislativos del 27 de octubre arrancó esta semana en Argentina con la inseguridad y la inflación en el centro de los proyectos con los que los partidos políticos tratarán de conseguir el voto de los electores.
En las legislativas, los argentinos renovarán 127 diputados nacionales, que cumplirán un mandato de cuatro años, y 24 senadores por el plazo de seis. La campaña se inició apenas mes y medio después de la celebración de las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en las que el oficialismo obtuvo unos resultados inesperados.
En las PASO, el gobernante Frente para la Victoria (FpV) se impuso a nivel nacional, pero quedó en el segundo puesto en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país. El partido de la presidenta Cristina Fernández —que en los comicios presidenciales de 2011 cosechó el 54% de los votos, lo que supuso su reelección— obtuvo en las primarias el 26,31%. El principal responsable del revés oficialista fue el actual alcalde de la localidad bonaerense de Tigre y exjefe de Gabinete de Fernández, Sergio Massa.
Alianzas. Massa, encabezando la lista de candidatos a diputados por el opositor Frente Renovador (FR), obtuvo el 35,05% en la provincia de Buenos Aires, frente al 29,65% de Martín Insaurralde, del FpV.
Conscientes de que el resultado en las PASO no es definitorio de lo que pueda pasar en las legislativas, los principales partidos llevan semanas trabajando para afianzar sus posiciones o mejorarlas. Si se repite el resultado de las PASO, el oficialismo, que tiene que renovar en las legislativas 31 de los 109 diputados que tiene en la Cámara, mantendrá la primera mayoría a nivel nacional y, junto a sus aliados, el control de Diputados. Para ello, el partido de Fernández tratará de subrayar las mejoras logradas desde el Gobierno del país en estos años, como la estatización de los fondos jubilatorios, de Aerolíneas y Aguas Argentinas, de YPF, la financiación docente, la Ley de Medios y el pago de la deuda al FMI.
Por su parte, la oposición trabaja en ofrecer a los electores alternativas a la inseguridad, principal preocupación de los argentinos según las última encuestas, y los elevados precios de los productos, sobre todo los que forman parte de la canasta básica
Ofertas. La situación del campo, objeto de numerosas protestas por parte de los gremios agrícolas en los últimos meses, también adquiere especial relevancia durante la campaña. Por ello, estos días, serán habituales los acercamientos entre los aspirantes a senadores y diputados con intendentes y dirigentes ruralistas, en busca de mesas de diálogo de las que surjan propuestas que incluir en sus proyectos. Según el cronograma electoral, la campaña se extenderá hasta el 25 de octubre.
El jueves se realizó el depósito del aporte de campaña y las papeletas electorales, cuyos modelos se presentaron el viernes a la vez que se ratificaron la ubicación de las mesas y las autoridades que las presidirán el día de los comicios. El 2 de octubre comenzará la campaña en los medios, el 12 quedará prohibida la publicidad de actos de Gobierno y a partir del 19 no se podrán hacer públicos los resultados de encuestas. El 27 de octubre se celebrarán las elecciones nacionales legislativas, en las que estarán habilitados para votar unos 30,5 millones de argentinos, y el 29 comenzará el escrutinio definitivo.
Las legislativas serán fundamentales para saber las posibilidades de Fernández de aspirar a un tercer mandato, ya que debe lograr apoyos parlamentarios suficientes para forzar una reforma constitucional.
Massa lidera la oposición
A un mes de la celebración de elecciones legislativas en Argentina, la oposición mantiene un claro liderazgo en los sondeos en la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral, y trabaja para ampliar la ventaja obtenida en las primarias de agosto.
“Se vislumbra como el inicio de un fin de ciclo”, declaró Jorge Arias, analista político de la consultora Polilat. La sociedad argentina —dijo— parece haber depositado en el exjefe de Gabinete y actual líder del opositor Frente Renovador, Sergio Massa, “la confianza para liderar ese movimiento de oposición”. Massa, alcalde de la localidad bonaerense de Tigre, aventaja por 13 puntos al primer candidato a diputado por el oficialismo Martín Insaurralde, según una encuesta de la consultora privada Raúl Aragón y Asociados.
De confirmarse los pronósticos, Massa se quedaría cerca de triplicar los casi cinco puntos de diferencia con que ganó en las primarias del 11 de agosto, cuando obtuvo el 35,05% de los votos y el candidato kirchnerista, el 29,65%.
En las primarias, el gobernante Frente para la Victoria (FpV) se mantuvo como primera fuerza nacional con el 26,31% de los votos totales, pero quedó muy lejos del 54% con el que Cristina Fernández fue reelegida en las presidenciales de 2011 y perdió la elección en los principales distritos del país, como las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y la capital argentina. Tras las primarias, el oficialismo adoptó medidas para aumentar la seguridad y redujo la presión fiscal sobre las clases medias, pero las decisiones parecen insuficientes para atraer a los electores descontentos.
En los comicios legislativos del 27 de octubre estarán habilitados para votar unos 30,5 millones de argentinos, entre ellos, por primera vez, jóvenes desde los 16 años. En las elecciones, celebradas a mitad del segundo mandato de Fernández, Argentina renovará la mitad de los 257 escaños de diputados y un tercio de los 72 del Senado.