Obama pide que cese la ‘farsa’ del bloqueo presupuestario
Pagarán a los empleados obligados a tomar vacaciones
Barack Obama acentuó ayer su presión sobre los republicanos y pidió al Congreso que adopte rápidamente un nuevo presupuesto para detener “esta farsa” que tiene al Gobierno paralizado desde hace cinco días.
“Vayan y voten. Paren esta farsa y pongan fin al cierre, ahora», dijo el Presidente estadounidense al dirigirse a los representantes republicanos en su locución semanal de radio y televisión.
Republicanos y demócratas de la Cámara de Representantes y del Senado se reunieron ayer sábado para intentar lograr un acuerdo sobre el presupuesto, que desde el martes tiene paralizado al Estado federal, pues no puede funcionar sin esa ley.
Durante el encuentro, sin tocar la cuestión clave de la parálisis (la ausencia de presupuesto para el ejercicio presupuestario 2014 que se inició el 1 de octubre), los legisladores lograron ponerse de acuerdo para remediar una de sus consecuencias. En la mañana, aprobaron por unanimidad una medida que permitirá a los 900.000 empleados federales obligados a tomar vacaciones forzosas sin sueldo recibir su paga de forma retroactiva para todos los días perdidos de trabajo, hasta que la parálisis llegue a su fin.
El Mandatario y sus aliados demócratas, mayoría en el Senado, propusieron negociar formalmente un presupuesto a largo plazo, pero como condición exigen la votación en la Cámara de Representantes (dominada por republicanos) de una ley de finanzas de seis semanas para reabrir el gobierno federal. La ausencia de acuerdo provocó que desde el martes EEUU cerrara algunos servicios no esenciales de la administración pública.
Los republicanos, que se oponen a la reforma de la salud (conocida como “Obamacare”) cuya implementación entró en vigor el martes, rechazan votar un presupuesto que no recorte su financiamiento. “Los estadounidenses no quieren que su gobierno se paralice, ni yo tampoco”, indicó el viernes el líder republicano en el Congreso, John Boehner. “Lo único que pedimos es sentarnos, discutir, reabrir el Estado federal e introducir equidad para los estadounidenses en el Obamacare”, dijo Boehner durante una conferencia de prensa.
Además, han amenazado con atar a la negociación presupuestaria la autorización para que EEUU emita más deuda. Pero Obama advirtió que no cederá al chantaje. “No pagaré un rescate a cambio de la reanudación de la administración. Y por supuesto no voy a pagar un rescate a cambio del aumento del tope de la deuda”.
Riesgos Sin un acuerdo que permita aumentar el tope legal de endeudamiento del país antes del 17 de octubre, Estados Unidos podría entrar en moratoria por primera vez en su historia. El tope de endeudamiento, que se alcanzó en mayo, es de 16,7 billones de dólares, y el déficit mensual ronda los 60.000 millones de dólares que deben ser obtenidos en los mercados financieros.
“Así como la parálisis presupuestaria es peligrosa, una parálisis económica como consecuencia de un incumplimiento de pago sería aún peor”, aseguró Obama. En tanto, los republicanos se defienden de la idea de que son los culpables de esta crisis.
Para acentuar aún más la presión de los republicanos, el secretario de Estado, John Kerry, advirtió que la crisis presupuestaria prolongada en Washington podría debilitar la posición de Estados Unidos en el mundo.
“Si (la situación) se prolonga, o se repite, la gente podría empezar a poner en duda la voluntad de Estados Unidos para mantener el rumbo y su capacidad para hacerlo. Pero no es el caso y no creo que lo sea”, dijo Kerry en una conferencia de prensa antes de la apertura el lunes de la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), en la isla indonesia de Bali.
Efectos del cierre del gobierno
Reacciones
La situación estadounidense incrementó la inquietud entre los mercados bursátiles mundiales esta semana.
Acuerdos
La UE tuvo que anular la segunda ronda de negociaciones con EEUU sobre la puesta en marcha de un tratado de libre comercio.