El Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil libró la primera orden de prisión en el histórico caso de corrupción política conocido como “mensalao”, por el cual fueron acusadas 25 personas, entre ellas importantes colaboradores del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva.
El condenado que irá a prisión es el exdirector del Banco de Brasil Henrique Pizzolatto, sentenciado a 12 años y 7 meses de cárcel por los delitos de peculado y lavado de dinero.
El caso del “mensalao”, o gran salario mensual, consistió en el pago de sobornos a legisladores de la coalición a cambio de votos por parte del oficialista Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) entre el 2003 y 2005, al inicio del primer mandato de Lula.
El STF decidió también la suerte de 13 de los 25 sentenciados en 2012. Entre ellos también se encuentra Roberto Jefferson, delator del sistema de corrupción y condenado a 7 años de cárcel. Su pena fue ratificada. También se ratificaron las sentencias de los actuales diputados Pedro Henry (PP, oficialista) a 7 años y 2 meses, y Valdemar Costa Neto (independiente), a 7 años y 10 meses.
En esta lista sólo Pizzolatto cumple prisión efectiva porque supera los ocho años de condena. El resto, aunque podría ser detenido en un inicio, cumpliría la sentencia en régimen semiabierto o con servicios comunitarios y pagos de multas.