Fiscalía chilena investiga envío récord de droga a Francia en camión del Dakar
La cocaína embarcada en Chile procedía de países productores latinoamericanos, como Bolivia y Colombia, y el cargamento se dirigía a España, según fuentes de la fiscalía francesa a cargo.
La Fiscalía y la policía chilenas iniciaron este viernes una investigación por la incautación récord en Francia de 1,4 toneladas de cocaína transportadas en un camión que participó en el Rally Dakar 2014, transportado en barco desde Chile.
El gobierno chileno pidió un informe a la Policía de Investigaciones (PDI) sobre «las condiciones en que ese camión que participó en el Rally Dakar habría salido con drogas del puerto de Valparaíso».
«He hablado recientemente con el subdirector subrogante de la Policía de Investigaciones, estaba recopilando todos los antecedentes», dijo el ministro chileno del Interior, Andrés Chadwick, desde el Palacio de La Moneda.
La droga llegó oculta en las ruedas de un camión el martes al puerto francés de Le Havre a bordo del mercante «Río Nevado», procedente del puerto de Valparaíso (120 km al oeste de Santiago), donde terminó la competencia el pasado 18 de enero.
La cocaína embarcada en Chile procedía de países productores latinoamericanos, como Bolivia y Colombia, y el cargamento se dirigía a España, según fuentes de la fiscalía francesa a cargo.
La fiscalía chilena, por su parte, designó a cargo de la investigación a un experto especializado en delitos de drogas, Alejandro Ivelic, que será apoyado por la Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones de la Fiscalía Nacional (UCIEX), según medios locales.
La droga incautada representa un valor de revena de 270 millones de euros (unos 370 millones de dólares).
La policía francesa, alertada por una información de las autoridades búlgaras a principios de febrero, siguió a un camión cuando el mismo salía del puerto francés de Le Havre junto con un vehículo de acompañamiento.
Los dos vehículos fueron interceptados el jueves en una zona de descanso de autopista en el centro de Francia, y sus conductores, dos españoles, fueron detenidos, a la espera de ser interrogados en Nanterre (periferia de París).