Escapes
Hallan tumba de pantalones
Un equipo internacional de arqueólogos ha hecho un descubrimiento que los dejó perplejos: los pantalones más antiguos del mundo. La prenda fue fechada hace unos 3.000 años y es muy similar a los de la actualidad. El hallazgo tuvo lugar en unas excavaciones recientes realizadas en la tumba Yanghai de Tarim Basin, al oeste de China. “Se parecen a los actuales, tanto en forma como en costura”, coincidieron los autores del descubrimiento, Ulrike Beck y Mayke Wagner, quienes también han apuntado que no suele ser habitual que tejidos de tanta antigüedad sobrevivan sin descomponerse, así que no saben si será posible realizar un hallazgo similar en otras partes del mundo.
En un reporte de El País, los investigadores explicaron que el clima seco y caluroso del verano han ayudado a preservar los cadáveres humanos, su ropa y otros materiales orgánicos en la cuenca del Tarim. Más de 500 tumbas han sido excavadas allí desde principios de 1970. Según apunta Science News, esta prenda habría pertenecido a pastores nómadas de Asia Central. Todos los datos indican, además, que éstos habrían sido los inventores de la prenda, que les permitía mayor libertad de movimientos cuando montaban a caballo, y por tanto una cierta ventaja en la guerra contra otros jinetes. Los dos pastores hallados en la tumba con los pantalones tenían aproximadamente unos 40 años al morir y fueron enterrados con diversos objetos de cuero y metal.
La ejecución de ‘Mata Hari’
Margaretha Geertruida Zelle nació en Leeuwarden, Países Bajos, el 7 de agosto de 1876. Esta hija de un sombrerero se casó en Ámsterdam con el militar Rudolf Campbell, siempre demostró interés por hombres de uniforme. Vivió en Java y Sumatra, tuvo dos hijos, uno murió envenenado. La adicción de su marido al alcohol causó el divorcio, para entonces ya estaba sumida en el mundo del espionaje. Se hacía pasar por una bailarina exótica bajo el nombre de Mata Hari, que significa ojo del día. Se presentaba con poca ropa para seducir a los militares de alto rango y así obtener información que luego pasaba a los oficiales alemanes durante la Primera Guerra Mundial. Fue acusada de hacer el mismo juego pero a la inversa, es decir, pasando información del ejército alemán a militares franceses, como no se pudo comprobar este extremo y ante la duda fue apresada por los franceses y una corte marcial la condenó a morir fusilada. Su ejecución fue en París el 15 de octubre de 1917. Las heridas por arma de fuego son letales según el lugar del cuerpo donde se asestan, la causa de muerte es por hemorragia producto de la lesión, el paciente tiene alteración de la conciencia, su corazón late más rápidamente, la presión arterial baja, hay palidez y, finalmente, muerte. Si hay atención médica se debe detener la hemorragia, reponer la sangre perdida y reparar con cirugía los órganos afectados. Se dice que Mata Hari se despidió del pelotón francés con un beso y agitando la mano, elegante. Dr. Aníbal Romero Sandóval, Emergencias hospital Arco Iris