El líder del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México de un municipio del violento estado de Michoacán (oeste) fue asesinado a balazos el jueves, informó la fiscalía estatal.
Salvador Vega Ramírez, de 34 años, presidente del PRI en el municipio de Erongarícuaro fue secuestrado al mediodía cuando se encontraba en un comercio, indicó la dependencia en un comunicado.
Menos de una hora después su cadáver fue localizado «sobre la carretera Erongarícuaro-Pátzcuaro. A simple vista, la víctima presentó diversos impactos de proyectil de arma de fuego», precisó la dependencia.
El combate a la violencia es uno de las principales retos del presidente Enrique Peña Nieto, que en diciembre de 2012 devolvió al PRI al poder tras 12 años de gobierno del Partido Acción Nacional (PAN).
Michoacán, con costas en el Pacífico y clave para el narcotráfico a Estados Unidos, es uno de los estados más violentos; es bastión del sanguinario cartel de drogas Los Caballeros Templarios, y aunque varios de sus líderes ya han sido detenidos o abatidos, aún permanece prófugo y activo el capo Servando Gómez, apodado «La Tuta», es (o era) un exmaestro de una escuela rural.
Además del trasiego de drogas, Los Caballeros Templarios, al igual que otros carteles mexicanos, obtienen recursos económicos adicionales extorsionando a la población en general, incluso a servidores públicos.
En febrero de 2013, algunos alcaldes dijeron a la AFP bajo anonimato que están obligados a pagar una cuota a integrantes del crimen organizado para garantizar su integridad física, aunque algunos se han negado.
Al menos unos 30 alcaldes de varios estados han sido asesinados desde que el gobierno del expresidente Felipe Calderón (2006-2012) militarizó la guerra contra las drogas, con un saldo de más de 80.000 muertos hasta la fecha según conteos oficiales.