El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció ayer el envío de hasta 300 miembros de las fuerzas especiales a Irak para aconsejar a las fuerzas armadas iraquíes ante el avance de los yihadistas del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL).

Estos militares se sumarán a los 275 que la Administración Obama ha desplegado para proteger la embajada norteamericana en Bagdad. Obama también anunció el envío del secretario de Estado, John Kerry, a la región, donde se reunirá con el primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, que EEUU ve como un freno para la reconciliación.

El envío de las fuerzas especiales, que en el futuro podrían servir para localizar objetivos de posibles bombardeos, es un gesto limitado, más simbólico que efectivo sobre el terreno. Obama descarta de momento una intervención aérea, y ha insistido en que, de todas las opciones que contempla ahora, ninguna incluye un despliegue terrestre.

EEUU afronta dos adversarios en Irak. El primero es militar: los yihadistas suníes de EIIL, que en las últimas semanas han tomado ciudades clave en el país de Oriente Medio. El segundo adversario es político: el primer ministro iraquí, Al Maliki. La Administración Obama atribuye a las políticas sectarias de Al Maliki, un antiguo protegido de Washington, parte de la culpa por el actual caos y lo considera un obstáculo para la resolución del conflicto. EEUU ha redoblado en los últimos días la presión sobre el Primer Ministro para que impulse el diálogo con suníes y kurdos y los incluya en su Gobierno. Algunas voces, de forma explícita en el Congreso y más discreta en la propia Casa Blanca, piden directamente que dimita y ceda el paso a nuevos líderes.

Reservistas El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, decidió llamar a los reservistas del Ejército a luchar contra la insurgencia suní, liderada por el grupo yihadista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL), informó ayer la agencia de noticias EFE.

En un comunicado, Al Maliki, en calidad de jefe de las Fuerzas Armadas, convocó a los oficiales que tengan un rango de general de brigada o superior, y anunció un salario de unos 430 dólares para los civiles voluntarios. “En vista de las circunstancias por las que está pasando Irak y la reestructuración del Ejército iraquí, y mediante un proceso de evaluación de la situación actual de las FFAA, llamamos a los reservistas que están bajo órdenes de la Dirección General de Guerreros o a la espera de jubilación”, indicó en el comunicado.

Esta decisión se produce tras la toma por EIIL de Mosul, la segunda ciudad del país, el 10 de junio. Esta organización yihadista se ha impuesto en varias zonas del norte del país y ha avanzado hacia la capital, después de que varios oficiales abandonaran el campo de batalla, creando caos en las tropas iraquíes.

John Kerry viajará a la región

El presidente de Estados Unidos también anunció el envío del secretario de Estado, John Kerry, a Europa y Medio Oriente para realizar consultas sobre cómo abordar la crisis iraquí. Kerry se reunirá con el Primer Ministro iraquí, a quien EEUU ve como un freno para la reconciliación.