Icono del sitio La Razón

Argentina señala que fallo en EEUU pone en riesgo al país

La decisión de la Justicia de EEUU de obligar a Argentina a pagar a fondos especulativos “pone en riesgo al país” y su economía, afirmó ayer en Nueva York el ministro argentino del ramo, Axel Kiciloff, ante delegados del G77+China en Naciones Unidas.

“Argentina quiere seguir pagando su deuda reestructurada, pero no la dejan. Es un caso inédito, insólito, porque nos han impuesto determinadas condiciones que ponen en riesgo no ya la reestructuración, sino la economía en su conjunto, pone en riesgo al país”, sostuvo Kiciloff.

En un discurso de más de media hora, el ministro argentino explicó en esos términos a los embajadores del G77 ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) por qué su país pide la suspensión de una sentencia judicial que la pone al borde de un nuevo default.

Mora. El fallo del juez neoyorquino Thomas Griesa en favor de fondos especulativos que litigaban deuda argentina en mora, obliga a Buenos Aires a pagar en efectivo unos $us 1.330 millones en adeudos provenientes de la moratoria declarada en 2001.

Argentina busca negociar con estos fondos, a los que llama “buitres” porque compraron la deuda ya en default, para evitar que le embarguen el dinero destinado al pago a acreedores que aceptaron canjes de deuda en 2005 y 2010, a los que debe pagarles el 30 de junio unos $us 900 millones. Pero exige negociaciones “justas y balanceadas” para hallar una solución.

“El Gobierno al que pertenezco no adquirió la deuda, el Gobierno al que pertenezco no fue al default, el Gobierno al que pertenezco lo que hizo fue normalizar las relaciones financieras con mucho esfuerzo”, dijo Kiciloff al explicar los canjes con acreedores en 2005 y 2010.

Para el ministro, la decisión de Griesa “empuja a la Argentina a un riesgo de crisis económica” porque “imposibilita una reestructuración. Aquel que no acepta la reestructuración, va a tener un tribunal que le acepte el total de la deuda”. Insistió en que Argentina “está dispuesta a negociar de buena fe”.

“¿Pero qué situación tenemos? Si de aquí al 30 de junio el juez que ha marcado esta sentencia no pone un paraguas legal, una suspensión de la sentencia, la negociación se daría en una condición muy compleja”. El Gobierno argentino, expresó, aún no ha recibido una respuesta al pedido de suspender la decisión. Griesa, no obstante, nombró un supervisor para el diálogo.

En la reunión, Kiciloff recibió el apoyo explícito de los embajadores de India, Marruecos, Brasil, Pakistán y Egipto, y prácticamente de todos los países latinoamericanos. El G77 acordó enviar cartas a Griesa y a los jueces de la Suprema Corte estadounidense expresando la preocupación de los países del grupo con las consecuencias de la decisión.

Poco antes de empezar la ponencia, la presidenta Cristina Kirchner destacó en su cuenta de Twitter la intervención de su ministro de Economía. “Reiteramos la importancia de no permitir que fondos buitres paralicen actividades de reestructuración de la deuda de países en desarrollo ni priven a los Estados de su derecho a proteger a sus pueblos conforme al derecho internacional”, escribió.

En la jornada, el supervisor especial nombrado por el juez Griesa para conducir las negociaciones, el abogado Daniel Pollack, confirmó que las partes mantuvieron una reunión con él y tuvieron contactos telefónicos en las últimas 48 horas, pero añadió que “ninguna resolución fue alcanzada”.

Asimismo, los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de las Américas (Alba) condenaron ayer como un “ataque a la soberanía” de Argentina la decisión de la Justicia estadounidense y manifestaron “su respaldo al Gobierno de Argentina”, informó un comunicado del Alba emitido en Caracas.