Un total de 47 adolescentes murieron este lunes en un atentado perpetrado contra su instituto, situado en el norte de Nigeria, por un kamikaze vestido de colegial, una masacre atribuida al grupo islamista nigeriano Boko Haram, que afirma luchar contra la educación occidental.

El presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, condenó en un comunicado este «asesinato odioso» y prometió capturar a los culpables «lleve el tiempo que lleve».

La explosión se produjo en un instituto público para varones en Potiskum, capital económica del Estado de Yobe, una de las tres regiones donde impera la ley marcial desde hace un año y medio para hacer frente a la insurrección de este grupo islamista, que ha dejado más de 10.000 muertos en cinco años.

La masacre tiene lugar al día siguiente de la publicación de un nuevo video en el que el líder de Boko Haram, Abubakar Shekau, rechaza de nuevo la petición del gobierno en pro de una tregua y de conversaciones de paz.

Los estudiantes del Government Comprehensive Senior Science Secondary School estaban esperando el discurso diario del director de la escuela cuando tuvo lugar la explosión a las 07H50 (06H50 GMT), explicó un profesor.

La explosión la provocó «un kamikaze», que se infiltró entre los estudiantes gracias a un uniforme del establecimiento escolar, indicó el portavoz de la policía nacional, Emanuel Ojukwu.

«Tenemos 47 muertos y 79 heridos», agregó, añadiendo que se sospechaba que los islamistas de Boko Haram eran los autores del ataque.

Según varios testimonios, quedaron esparcidos zapatos, libros escolares, restos humanos y sangre en este centro, que acoge a unos 1.000 alumnos de entre 15 y 20 años.

«Me encontré bajo el peso de otro estudiante. Estoy seguro de que estaba muerto. Me mareé», dijo a la AFP Adamu Abdulahi, que se hallaba en el centro de la explosión que arrojó a los alumnos en todas las direcciones.

«Empujé el cuerpo y empecé a correr como todo el mundo (…) Todos estábamos histéricos», añadió este estudiante, quien se marchó directamente a casa.

Las víctimas fueron trasladadas al hospital general de Potiskum, a 100 metros de la escuela.