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Cuba festeja a Fidel y la apertura de la Embajada de EEUU

El expresidente de Cuba Fidel Castro cumple hoy 89 años, un aniversario que se celebrará con conciertos y homenajes en vísperas de la primera visita de un secretario de Estado de Estados Unidos a Cuba en muchas décadas, para la reapertura de la embajada de ese país en la isla.

John Kerry encabezará mañana el acto formal de la reapertura de la embajada en La Habana, fruto del deshielo de las relaciones entre dos países que fueron antagonistas durante más de medio siglo, un periodo que abarca prácticamente la totalidad de los años en los que Fidel Castro estuvo al frente del Gobierno en territorio cubano.

Como es costumbre en los últimos años, se llevarán a cabo varios festejos por el cumpleaños del líder cubano, retirado del poder desde 2006 y sucedido por su hermano Raúl. Ayer por la noche se celebró en La Habana un concierto por el Día de la Juventud y por el cumpleaños de Castro en la llamada Tribuna Antiimperialista José Martí, en el antiguo estacionamiento de la Embajada de Estados Unidos, que mañana celebrará el acto formal de su reapertura.

Programa. Kerry, el primer secretario de Estado de EEUU que visitará Cuba desde 1945, encabezará ese día la ceremonia del izado de la bandera estadounidense en la embajada, un acto que culminará el histórico proceso del restablecimiento de relaciones diplomáticas, restauradas el 20 de julio.

Hoy, en inmediaciones de la sede diplomática de EEUU, en el Malecón de la capital cubana, también se realizará una versión infantil del Carnaval habanero, incluida en el programa de festejos por los 89 años de Castro.

Una “Rumba grande para hombres inmensos”, con la participación de artistas de ese género musical, forma parte de la programación de celebraciones, que se inauguró el lunes con la exposición fotográfica Un rebelde en Rebelde, tomadas por reporteros del diario oficialista Juventud Rebelde.

A comienzos de agosto, el presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció que él y otros mandatarios de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) viajarían a territorio cubano para celebrar el 89 aniversario de Fidel Castro.

El embajador de Cuba en Bolivia, Benigno Pérez, destacó ayer la visita que hará Morales a la isla. “El año pasado estuvo en cuatro oportunidades y este año, ahora va al cumpleaños de Fidel (Castro), para nosotros es una honra, un honor que el presidente Evo Morales vaya a Cuba siempre, y bueno en esta ocasión, especialmente”, dijo en contacto con la Red Patria Nueva.

En ninguno de los actos de homenaje por su cumpleaños se ha anunciado la presencia de Fidel, quien desde 2006, cuando enfermó y se retiró del poder, mantiene un bajo perfil público con esporádicas apariciones, la última de ellas en julio durante un encuentro con oficiales y trabajadores civiles del Ministerio del Interior y las Fuerzas Armadas.

En mayo, el líder de la revolución cubana recibió en su domicilio de La Habana a varias personalidades políticas de visita en suelo cubano como el ministro japonés de Exteriores, Fumio Kishida; el presidente de Francia, François Hollande, o el presidente serbio, Tomislav Nikolic.

El bloqueo, en la mira

Ofensiva

Un grupo minoritario de legisladores estadounidenses intenta romper el embargo contra Cuba, lanzando una ofensiva contra la dura resistencia política a acabar con décadas de sanciones comerciales a la isla.

John Kerry se verá con disidentes cubanos

El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, se verá con disidentes y representantes de la sociedad civil cubana en una reunión posterior a la ceremonia oficial del izado de la bandera en la embajada de su país en La Habana. Ese encuentro tendrá lugar mañana en la residencia del encargado de negocios de la embajada de EEUU, Jeffrey De Laurentis.

A esa reunión han sido invitados disidentes como la líder de las Damas de Blanco, Berta Soler, Elizardo Sánchez, de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, Miriam Leiva, Antonio González-Rodiles o Manuel Cuesta Morúa.

Para Berta Soler, el encuentro con Kerry será una oportunidad para que el más alto representante del Gobierno estadounidense pueda “escuchar el pensamiento y las preocupaciones de la sociedad civil independiente” en Cuba y de “hablar abiertamente de derechos humanos y presos políticos”. El Gobierno de Estados Unidos no ha invitado a disidentes cubanos al acto formal de reapertura.