La OEA pide una reforma electoral en Guatemala que frene el transfuguismo
Guatemala celebró comicios en septiembre pasado para elegir a casi 4.000 servidores públicos para el período 2016-2020, incluidos presidente, vicepresidente y 158 diputados.
La Organización de Estados Americanos (OEA) valoró hoy los comicios «pacíficos» celebrados en Guatemala en 2015, pero reclamó una reforma electoral que frene el transfuguismo, ahonde en la fiscalización de las cuentas de los partidos y fomente la participación de mujeres e indígenas.
El jefe de la misión de observación de la OEA, Juan Pablo Corlazzoli, entregó el informe de trabajo al presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Rudy Marlon Pineda, en el que se destaca la madurez del pueblo guatemalteco en la celebración de unas elecciones «históricas» en un momento clave para afianzar la democracia en el país centroamericano.
Guatemala celebró comicios en septiembre pasado para elegir a casi 4.000 servidores públicos para el período 2016-2020, incluidos presidente, vicepresidente y 158 diputados.
En dichos comicios, tras una segunda vuelta en octubre, el actor Jimmy Morales, de 46 años, ganó la Presidencia y relevó en enero pasado a Alejandro Maldonado, nombrado mandatario por el Congreso en septiembre tras la renuncia de Otto Pérez Molina, quien está en prisión preventiva acusado de actos de corrupción.
La OEA apostó por concretar una reforma electoral que ponga fin a las prácticas de transfuguismo: desde la toma de posesión de los nuevos diputados, el pasado 14 de enero, la bancada oficial, de Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), pasó de 11 diputados, electos en las elecciones generales del pasado 6 de septiembre, a 30.
Asimismo, es necesario «fortalecer la autonomía» del TSE dotándolo de competencias y fondos suficientes para fiscalizar las cuentas de los partidos políticos en las campañas electorales, uno de los embriones de la corrupción en el país.
La capacidad que tiene actualmente el tribunal electoral es «insuficiente», apuntó Corlazzoli, lo que le impide controlar los gastos de los partidos y el origen de sus fondos.
La medida planteada por la OEA pasa por dotar de más medios al tribunal, acompañándolo de un régimen de sanciones para frenar las irregularidades.
Otra de las áreas susceptibles de mejora es la inclusión de colectivos como la comunidad indígena, cuya participación política es reducida -solo 18 de los 158 diputados actuales pertenecen a los grupos étnicos-, pese a representar el 40 %o de la población.
En esta misma línea, las mujeres constituyen solo el 13 % de todos los diputados de esta nueva legislatura, por lo que la OEA propone imponer una cuota progresiva tendente a la paridad acompañada de sanciones ante incumplimientos.
Además, el organismo internacional abogó por «profundizar» las iniciativas que favorecen la inclusión de las personas con discapacidad e impulsar medidas para «facilitar» la participación de la diáspora.