El presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció este miércoles la designación de José Antonio Meade como nuevo secretario de Hacienda y Crédito Público en lugar del dimisionario Luis Videgaray con la instrucción de que elabore el presupuesto del Estado para 2017 y realice nuevos recortes al gasto público.
En un acto en la residencia presidencial de Los Pinos, el gobernante dijo que Videgaray le presentó «esta mañana» su «renuncia al cargo» y él la aceptó, como había confirmado una fuente oficial a Efe antes del anuncio presidencial.
Meade abandona de esta forma su cargo de secretario de Desarrollo Social, que asumirá el actual subsecretario de Gobernación (Interior), Luis Enrique Miranda, cuyo nombramiento también fue anunciado este miércoles por Peña Nieto.
Entre los retos de Meade al frente de la Secretaría de Hacienda está el de «continuar con la aplicación de medidas de responsabilidad fiscal», a partir de «un ajuste del gasto público».
«Meade tiene una amplia experiencia en materia de finanzas públicas», destacó el mandatario, quien le encomendó varias tareas antes de que asumiera el cargo junto a Miranda en el evento.
Entre ellos, dijo, presentar al Congreso el presupuesto para el ejercicio fiscal 2017, que incluirá un nuevo ajuste al gasto público que «recaerá en el Gobierno y no en la ciudadanía».
Deberá buscar «responsabilidad fiscal para contener y estabilizar el crecimiento de la deuda del sector público como proporción del Producto Interno Bruto (PIB)», detalló el presidente, quien enfatizó en la necesidad de «contener el gasto público» y mejorar «la calidad» del ejercicio.
A Luis Enrique Miranda, nuevo titular de la Sedesol, le encomendó tareas como coordinar la estrategia nacional para erradicar la pobreza y mejorar el nivel de vida de los ciudadanos mexicanos.
En este anuncio de cambios en el gabinete, Peña Nieto dio muestras de su afecto hacia Videgaray, uno de sus colaboradores más cercanos desde sus tiempos como gobernador del Estado de México, entre 2005 y 2011.
«Le doy mi reconocimiento, no solo de manera institucional, sino también de forma muy personal a quien ha sido un colaborador muy comprometido con los esfuerzos del Gobierno de México», dijo.
La renuncia de Videgaray estaría motivada por el resultado de la visita del candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, a la residencia oficial de Los Pinos, que generó un rechazo casi unánime en el país por los insultos que el magnate ha lanzado contra los mexicanos desde junio de 2015.
Según trascendió en los últimos días, Videgaray defendió la necesidad del encuentro con el republicano en un intento de suavizar sus posiciones, entre ellos la cancelación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en caso de que Trump llegue a la Presidencia de EEUU.
(07-09-2016)