Obama defiende que EE.UU. es hoy ‘un lugar mejor’ que cuando llegó al poder
El mandatario, que abandonará el poder el próximo 20 de enero, reconoció que el progreso durante su Presidencia "no ha sido uniforme", y que "a veces parece que damos un paso atrás por cada dos pasos adelante", pero que su país siempre se ha caracterizado por "moverse hacia adelante".
El presidente de EE.UU., Barack Obama, defendió que su país es actualmente «un lugar mejor y más fuerte» que cuando él llegó al poder en 2009, y pidió a todos sus compatriotas que crean en su propia capacidad de lograr el «cambio» que él quiso espolear al llegar a la Casa Blanca hace ocho años.
«Ustedes fueron el cambio. Ustedes respondieron a las esperanzas de la gente, y gracias a ustedes, en casi cada medida, Estados Unidos es un lugar mejor y más fuerte que cuando empezamos», dijo Obama en su último discurso como presidente, pronunciado ante 20.000 personas en Chicago, la ciudad donde dio el salto a la política.
El mandatario, que abandonará el poder el próximo 20 de enero, reconoció que el progreso durante su Presidencia «no ha sido uniforme», y que «a veces parece que damos un paso atrás por cada dos pasos adelante», pero que su país siempre se ha caracterizado por «moverse hacia adelante».
Obama dijo que, si hace ocho años hubiera prometido que el país «dejaría atrás una gran recesión», abriría «un nuevo capítulo con el pueblo cubano, cerraría el programa nuclear de Irán», lograría la legalidad del matrimonio homosexual y reformaría el sistema sanitario, «me habrían dicho que estaba aspirando a demasiado».
El primer presidente afroamericano de Estados Unidos reconoció que, pese al carácter histórico que representó su elección, el racismo sigue vivo en el país y queda «más trabajo por hacer» para eliminar los prejuicios contra las minorías y los inmigrantes.
«Después de mi elección, se habló mucho de un Estados Unidos posracial. Esa visión, aunque bienintencionada, nunca fue realista.
Porque la raza sigue siendo una fuerza potente y a menudo divisoria en nuestra sociedad», admitió Obama.
A diez días de que su sucesor, Donald Trump, asuma el poder, Obama se comprometió a garantizar una transferencia de poder «pacífica», para que el próximo Gobierno «pueda ayudarnos a acometer los muchos desafíos que todavía enfrentamos».
Pese al contraste entre sus ideas y las de Trump, Obama aseguró sentirse «aún más optimista sobre el país» que cuando asumió el poder, porque sabe que su Gobierno no solo «ha ayudado a muchos estadounidenses, sino que también ha inspirado» a muchos otros, especialmente a los jóvenes.
«El futuro está en buenas manos», aseguró Obama al describir a la nueva generación como «altruista, creativa y patriótica» y pidió a todos los ciudadanos ser «guardianes» de la democracia, no solamente cuando haya una elección, sino «durante toda la vida».
«Nuestra democracia se ve amenazada si la damos por sentada», afirmó el mandatario.
Obama terminó su discurso con una serie de agradecimientos a su familia y su equipo en la Casa Blanca, y prometió seguir luchando por lo que cree cuando abandone el poder.
«Yes, we can. Yes, we did» (Sí, podemos. Sí, lo hicimos»), remató el presidente. (11/01/2017)