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Mexicanos expresan rechazo y temor tras primer discurso de Trump

En una aula de una universidad mexicana, estudiantes soltaban suspiros lastimeros y desviaban la mirada mientras veían la investidura de Donald Trump como presidente de Estados Unidos en una pantalla gigante, en tanto que cientos se manifestaban en las calles de la capital.

La sociedad mexicana no podía contener su rechazo al nuevo inquilino de la Casa Blanca que ha indignado al país latinoamericano con su discurso anti-inmigrante.

Casi medio centenar de alumnos se reunieron en el Instituto Tecnológico Autónomo de México -alma mater de los ministros de Economía, Relaciones exteriores y del titular del Banco de México- para mirar el primer discurso de Trump como presidente.

Para Ana Padilla de 23 años, estudiante de ciencias políticas y relaciones internacionales, Trump le habló directamente a su base electoral cuando se trataba de un discurso para toda la nación.

«Manda un mensaje peligroso tanto para minorías en Estados Unidos, musulmanes, mujeres, inmigrantes. A mí me preocupa», dijo Padilla, quien, pese a la incertidumbre generalizada sobre el rumbo político del país del norte, no descarta sus planes de hacer estudios de posgrado en universidades de Washington o Nueva York.

Trump busca construir un muro en la frontera sur de Estados Unidos y hacer que México pague por él. Además, durante su campaña calificó a los inmigrantes mexicanos de «criminales» y «violadores» y amenazó con bloquear sus remesas.

Los gestos de los jóvenes denotaron sospecha y preocupación al escuchar a Trump afirmar que va a devolver el poder de Washington «a la gente», mientras que la imagen de Hillary Clinton durante la investidura provocó murmullos de pesar.

«Como mexicano lo que más aflige es este cambio tan radical hacia un discurso que no buscó ni conciliar», dijo Carlos Galina, otro internacionalista en ciernes que como muchos de sus compañeros apostaba por la victoria de la demócrata Clinton.

«Hoy pudo haber sido el día en que se inauguraba la primera mujer presidenta de Estados Unidos», lamentó.

Vaticinio de ‘servilismo’

Más visceral y furibunda fue la reacción de manifestantes reunidos enfrente de la embajada de Estados Unidos en Ciudad de México y alrededor del emblemático monumento Ángel de la Independencia, en el céntrico Paseo de la Reforma.

José Antonio López, integrante del Movimiento Popular Revolucionario, vaticina que la administración del presidente mexicano Enrique Peña Nieto será la «más servil» en la historia de la relación bilateral y una primera prueba de ello, afirma, es la entrega del capo del narcotráfico Joaquín «El Chapo» Guzmán a la justicia estadounidense el jueves, un día antes de la toma posesión de Trump.

«íEPN primero lo compara con (el dictador italiano Benito) Mussolini y luego dice que buscará tener una buena relación con él! La extradición del Chapo puede ser muestra de esa actitud servil que se aproxima, puede ser una forma de querer congraciarse», afirmó.

Analistas están divididos en torno a la decisión sobre Guzmán, que algunos leen como una deferencia de México con la administración saliente y otros como una primera «ofrenda» a la de Trump.

Por su parte, Peña Nieto felicitó a Trump en Twitter y abogó por un fortalecimiento de las relaciones entre ambos países.

Un primer paso en esa dirección lo darán el canciller Luis Videgaray y el ministro de Economía Ildefonso Guajardo, quienes se reunirán el 25 y 26 de enero con integrantes del nuevo gobierno para tratar temas de seguridad, migración y comercio.

Videgaray, un economista considerado entre los hombres más cercanos a Peña Nieto, asumió la cancillería el 4 de enero luego de su renuncia en septiembre a la cartera de Hacienda, tras haber gestionado una polémica visita de Trump a México que desató una oleada de críticas de sectores políticos y sociales.

En contraste con la molestia de los mexicanos, los mercados financieros se mostraron despreocupados en el primer día de la era Trump, con el peso mexicano apreciándose un 1,6% en ventanillas bancarias y un 1,5% en el mercado mayorista, a 21,60, según datos del banco central.

Los indicadores financieros de México, que comparte una frontera de 3.200 km con Estados Unidos, han mostrado un comportamiento volátil alentado en parte por el discurso proteccionista de Trump, que insiste en renegociar e incluso retirarse del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, en vigor desde 1994.

«Hay una percepción de que ya se movió mucho el tipo de cambio, que ya se han descontado muchas noticias malas» en torno a eventuales medidas económicas y comerciales de Trump sobre México, explicó Benito Berber, estratega de Nomura Securities, en Stanford, Estados Unidos.

El peso anotó la semana pasada un mínimo histórico, por arriba de 22,00 por dólar, luego de que Trump reiteró que construirá el muro fronterizo y que castigaría con un gran impuesto a las empresas que muden inversiones fuera de Estados Unidos. (20/01/2017)