Aeronaves y buques de 13 países buscan en un área de casi 500.000 kilómetros cuadrados (km2) al submarino argentino «ARA San Juan» que continuaba desaparecido este miércoles en el Atlántico Sur, siete días después de reportar un desperfecto. Se presume que ha ingresado en fase crítica de oxigeno lo que supone un riesgo de supervivencia para sus 44 tripulantes.
La agencia AFP detalló unos 4.000 efectivos buscan al «ARA San Juan» en barcos y aviones de Argentina, Alemania, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, España, Estados Unidos, Francia, Noruega, Perú, Reino Unido y Uruguay.
El canciller argentino, Jorge Faurie, destacó hoy el «impresionante apoyo» que han recibido «del exterior» para encontrar a la embarcación. «Es realmente un hecho inédito. Voy a destacar que estos ofrecimientos fueron surgiendo espontáneamente. Tomaron contacto directo desde sus embajadas», afirmó a la emisora argentina Radio Mitre en declaraciones que recoge la agencia EFE.
«No hay rastros. No hay ningún tipo de contacto detectado ni indicios. Estamos en una fase crítica de oxígeno en el séptimo día, si el escenario fuese de que está en inmersión», dijo el vocero de la Armada, Enrique Balbi a AFP.
Un operativo de alerta preventiva se organizó en hospitales de Comodoro Rivadavia, en la Patagonia, 1.760 km al sur de Buenos Aires, adonde podrían ser llevados los marinos si son hallados
El sumergible es uno de los tres que posee la Armada. Debía haber llegado el lunes a su base en Mar del Plata, un puerto pesquero y el mayor centro turístico con playas del país, 400 km al sur de la capital. Los familiares de los tripulantes viven horas de angustia en el apostadero.
El último paradero conocido del submarino fue en la zona del Golfo San Jorge, en la Patagonia argentina, a 432 kilómetros de la costa, donde se encontraba en su camino desde la base naval de Ushuaia, la provincia más austral del país, y Mar del Plata, en el sur de Buenos Aires, a donde tendría que haber llegado este lunes. (22/11/2013)