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Buque militar español zarpa para recoger a los migrantes del Open Arms

El gobierno español envió este martes un buque militar a Lampedusa para recoger a los migrantes del Open Arms y finalizar la "emergencia humanitaria" a bordo del barco humanitario, del que varias personas saltaron al agua desesperadas por llegar a la costa italiana.

Varados desde el jueves a unos cientos de metros de la costa de la isla italiana, los migrantes no han podido desembarcar ante la negativa de Roma a permitirlo, pese a existir un acuerdo de seis países europeos para acogerlos.

Socorridos en el Mediterráneo por la oenegé española Proactiva Open Arms, algunos de los migrantes llevan 19 días a bordo del barco, igualando el récord que marcaron los 32 migrantes rescatados por el SeaWatch3 y desembarcados finalmente en Malta el pasado enero.

El patrullero español "Audaz" enviado por Madrid partió hacia las 18.30 (12.30 en Bolivia) de la base de Rota (sur), con 62 personas a bordo, mostró la televisión pública.

"Navegará durante tres jornadas hasta Lampedusa, donde se hará cargo de las personas acogidas en el Open Arms", para llevarlas a Palma de Mallorca, Baleares, indicó un comunicado del gobierno.

"Con esta medida España resolverá, esta misma semana, la emergencia humanitaria", tuiteó el presidente del gobierno, Pedro Sánchez.

"Fuera de control"

En un gesto desesperado, quince migrantes, algunos de ellos inclusive sin chalecos salvavidas, se lanzaron al agua para intentar llegar a nado a Lampedusa. Una portavoz de la oenegé española indicó que fueron rescatados por los guardacostas italianos y llevados a la isla.

"La situación está fuera de control", tuiteó Proactiva Open Arms, cuyo barco albergaba 147 migrantes al llegar cerca de Lampedusa y ahora tiene más de 80, luego de que decenas de menores de edad y enfermos fueran evacuados.

Ante la negativa del ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, a permitir el desembarco, Madrid propuso el domingo que el Open Arms fuera a Algeciras, en el extremo sur de España, y luego ofreció Baleares, más cerca pero de todas maneras a mil kilómetros de distancia de Lampedusa  Proactiva Open Arms declinó estas propuestas alegando que era inviable navegar varios días para alcanzar las costas españolas, por lo que Madrid finalmente propuso enviar un patrullero a Lampedusa para recoger a los migrantes.

A poco de llegar al poder en junio de 2018, el socialista Pedro Sánchez acogió al Aquarius y repetidas veces al Open Arms, aunque en los últimos meses no había permitido atracos de los buques humanitarios.

Cruce de recriminaciones

La suerte de los migrantes del Open Arms desembocó en un intercambio de recriminaciones entre España y Matteo Salvini, acusado de querer beneficiarse políticamente de este asunto en plena crisis política en Roma, donde el gobierno populista torpedeado por el jefe ultraderechista de la Liga cayó este martes.

Fustigando de nuevo a Salvini, cuya posición tildó el lunes de "vergüenza para la humanidad", la ministra española de Defensa, Margarita Robles, estimó este martes que "las vidas humanas no le importan nada".

"Ante la emergencia humanitaria, nadie debe mirar para otro lado. Nosotros no lo vamos a hacer, como lo está haciendo Salvini", subrayó.

"La firmeza es la única forma de evitar que Italia se convierta nuevamente en el campo de refugiados de Europa, como se demuestra nuevamente con el barco de la oenegé española de falsos enfermos y falsos menores", tuiteó Salvini.

Otro buque humanitario, el Ocean Viking, operado por SOS Méditerranée y Médicos Sin Fronteras (MSF), sigue buscando un puerto seguro con más de 350 migrantes a bordo.

(20/08/2019)