Escándalo por vacunas en Argentina: Alberto Fernández pide la renuncia del ministro de salud
El ministro de salud, de 75 años, no ha hecho ninguna declaración de momento.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, pidió la renuncia de su ministro de Salud después de que se revelara el viernes que allegados de éste se habían vacunado contra el COVID-19 en su despacho, sin necesidad de solicitar turno como los demás argentinos.
Fernández “le dio la indicación al jefe de gabinete (Santiago Cafiero) de pedirle la renuncia al ministro de Salud”, Ginés González García, dijo a la AFP una fuente gubernamental.
El ministro de salud, de 75 años, quien ya había estado al frente de esa cartera durante el gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007), no ha hecho ninguna declaración de momento.
Las vacunaciones “de privilegio” en la sede del Ministerio de Salud se conocieron el mismo día en que la ciudad de Buenos Aires habilitó la solicitud de turnos online para vacunar a mayores de 80 años a partir del próximo lunes, un mecanismo que colapsó casi de inmediato ante la enorme demanda.
Hasta ahora en Argentina solo se ha vacunado al personal de salud. Recién el miércoles comenzó la vacunación para mayores de 70 años en la provincia de Buenos Aires.
#VacunaVIP
El escándalo estalló luego de que el periodista Horacio Verbitsky contara este viernes en la radio que, gracias a su larga amistad con el ministro, pudo vacunarse en su despacho.
Además de su actividad como periodista, Verbitsky, de 71 años, también preside el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), dedicado a los derechos humanos.
Roberto Navarro, dueño del Destape Radio, la emisora en la que Verbitsky reveló su vacunación, anunció que canceló sus colaboraciones. “Es una inmoralidad que con 50 mil muertos haya vacunados VIP. Es inmoral quien lo autorizó y quien se vacunó”, escribió Navarro en Twitter.
También los empleados de CELS repudiaron el hecho. “Recibimos la noticia de que el presidente de nuestra organización fue vacunado por fuera del sistema establecido, a través de una cadena de favores y a título personal (…) El equipo de trabajadores del CELS rechaza esta o cualquier otra acción o privilegio”, publicaron en Twitter.
El escándalo provocó una catarata de reacciones en las redes sociales bajo el hashtag #vacunasvip.
Además de Verbitsky, otras personas cercanas al gobierno se vacunaron en el Ministerio de Salud, según la prensa local.
Argentina y el COVID-19
Argentina, con 44 millones de habitantes, suma más de dos millones de contagios de COVID-19 y supera las 50.000 muertes.
La vacunación comenzó a finales de diciembre pasado con la Sputnik V, del laboratorio ruso Gamaleya, pero el proceso avanza mucho más lentamente de lo previsto al comienzo, debido a la escasez de dosis.
El presidente Fernández y la vicepresidenta, Cristina Kirchner, fueron de los primeros en recibir la vacuna. Ambos mayores de 60 años lo hicieron ante las cámaras para transmitir confianza en la vacuna.
Hasta ahora, Argentina ha recibido 1.220.000 dosis de Sputnik V y 580.000 de Covishield, del instituto indio Serum, estas últimas llegadas el miércoles.
El plan incluye más adelante vacunas de la alianza británica Oxford/AstraZeneca, hasta completar este año 62 millones de dosis de diferentes contratos, entre ellos uno con el mecanismo internacional de cooperación Covax.